La falta de ejecución de las ordenanzas emitidas por la municipalidad en Chinandega, para sancionar a quienes promueven los basureros ilegales, la contaminación de los acuíferos y la tala en el bosque, permite el deterioro de los recursos hídricos en este departamento.
Una situación similar sucede en Estelí donde el río del mismo nombre además de haber quedado seco no ha recibido limpieza de parte de la autoridades locales.
Actualmente el noventa por ciento del agua que se consume en Nicaragua es subterránea, lo que es preocupante porque el país no tiene reservas y el agua superficial —de los ríos, lagunas y lagos— está contaminada, asegura Ruth Herrera, ex presidenta ejecutiva de la Empresa Nicaragüense de Acueductos y Alcantarillado (Enacal).
Un ejemplo de contaminación en las aguas superficiales, se puede observar en la cabecera del chinandegano Río Acome, en el sitio Hogar San José, que ha sido bloqueado por la basura que descargan carretoneros, triciclistas y automotores, sin ser castigados.
La alcaldesa Aura Lila Padilla, prometió limpiar bajo el puente San José–La Libertad y el Puente Don León y además anunció que multarán a los que consideran al río un basurero, pero según vecinos hasta hoy no se aplican las sanciones.
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Mientras que en Estelí, los dos años de sequía dejaron al río de la ciudad como un zanjón con polvo, piedra y hasta una rara vegetación que afectaría en invierno, por lo que requiere de una limpieza.
El alcalde de Estelí, Francisco Valenzuela, fue abordado sobre el tema y dijo que están preparándose para el invierno.
“Sí vamos a hacer una limpieza. Hay estamos preparándonos en el plan de limpieza para el invierno en eso estamos”, expresó Valenzuela.
La zona rural es que hace uso de las fuentes superficiales. Sin embargo, la mayoría de estas han quedado secas y otras han sido afectadas por la contaminación.
NICARAGUA SIN RESERVAS
Ruth Herrera, ex presidenta ejecutiva de la Empresa Nicaragüense de Acueductos y Alcantarillado (Enacal) afirma que en países como Honduras, Panamá y Costa Rica se usa del cuatro al diez por ciento del agua subterránea y normalmente se abastecen de fuentes superficiales, eso les garantiza que si esta fuente se ve afectada por la sequía, podrán recurrir al agua subterránea, que tienen como reserva.
Por su parte, la especialista en recursos hídricos Katherine Vammen, en el libro “Aguas Urbanas en las Américas” capítulo Nicaragua da a conocer que el agua en subsuelo está siendo sobreexplotada.
