“Todavía no tenemos claras las cosas” afirmó el jefe departamental de la Policía en Matagalpa, comisionado mayor Ángel Martín Solórzano, respecto de las circunstancias en las cuales un joven murió y un policía fue herido de bala, el recién pasado fin de semana en el municipio matagalpino de Muy Muy.
Evert Oswaldo Dávila Hernández, de 23 años, fue la víctima mortal del suceso, mientras que su primo Wagner Hipólito Rizo, de 24, quien es inspector de la Dirección de Investigaciones Económicas en la delegación departamental de la Policía en Matagalpa, recibió un impacto de bala en el abdomen, la noche del viernes 15 de abril recién pasado.
Rizo estaba fuera de servicio esa noche y con su primo Dávila presuntamente querían asaltar a una pareja que se movilizaba en una moto en la carretera entre los municipios de Muy Muy y Matiguás. “No te puedo hablar de implicancia ni nada por el estilo, porque solo tengo una versión (de los hechos), estamos trabajando (…) estamos conociendo que sucedió un hecho en el cual está muerta una persona y él (inspector Rizo) está lesionado”, apuntó Solórzano este lunes 18 de abril.
Rizo se encuentra hospitalizado en Matagalpa y Solórzano dijo que “seguimos un proceso que todavía se extiende hasta que tengamos un poquito más de espacio en condiciones de la salud del compañero (Rizo)”, para conocer su versión de los hechos.
Por este caso, que está bajo investigación de las direcciones de Auxilio Judicial y de Asuntos Internos de la Policía Nacional; un joven de aproximadamente 26 años y su acompañante, una muchacha de 22 años, habían sido detenidos como presuntos sospechosos, pero fueron liberados mientras continuaban las indagaciones policiales.
Pero, el mando policial insistió en que “estamos trabajando en coordinación para ver qué posibilidades (hay), estamos tratando de respetar los derechos constitucionales en el proceso investigativo”.
La única versión que maneja la Policía, según Solórzano, es que “alguien se le apareó y eso sucedió, o que le iban enamorando a la persona que llevaba atrás u otra cosa, sin embargo, faltan cosas qué investigar”.
“… No podemos esclarecer mientras no tengamos la versión de esa otra parte, que hay un muerto y un lesionado”, aseguró Solórzano.
De acuerdo con fuentes extraoficiales, la pareja investigada iba en una moto a la inauguración de un local cerca del rastro municipal de Muy Muy, cuando presuntamente Dávila y Rizo, a bordo de otra moto, los obligaron a detener la marcha.
Dávila presuntamente andaba la pistola asignada por la Policía a Rizo y encañonó al muchacho, cuya identidad no fue revelada, diciéndole a este y a la joven, tampoco identificada, que se trataba de un asalto.
Pero, en ese momento, otra pareja pasaba por el lugar en un carro que con las luces altas iluminó el sitio, por lo que Dávila se descuidó y el joven a quien presuntamente asaltaban aprovechó para sacar un revólver calibre 3-57 y dispararle en el pecho.
Mientras tanto, Rizo presuntamente permanecía a bordo de la moto propiedad de la Policía y al escuchar el disparo emprendió la huida, pero el joven le disparó impactándole en el abdomen.
Rizo fue a caer frente al rastro de Muy Muy, donde fue auxiliado por personal médico que casualmente pasaba por el lugar en una ambulancia en la que trasladaban a otro paciente hacia el hospital de Matagalpa, aprovechando para llevarlo a ese mismo centro asistencial, según el relato de una de las fuentes conocedoras del caso.