Unos cincuenta empleados afiliados a la Federación Nicaragüense de Sindicatos de Trabajadores del Agua han sido despedidos entre 2015 y 2016 de la Empresa Nicaragüense de Acueductos y Alcantarillados (Enacal). La denuncia la hizo Paulino Mayorga, secretario general de esa federación adscrita a la Central Sandinista de Trabajadores (CST), liderada por Roberto González.
Mayorga sostiene que los despidos fueron en su mayoría porque supuestamente se negaron a afiliarse a la Unión Nacional de Empleados (UNE).
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Mayorga aclaró que se trata de aproximaciones, pues únicamente pueden contabilizar los despidos de Managua, que en 2015 fueron más de 30 y no tienen cifras concretas del resto del país. En los primeros cuatro meses del año ya suman 16 despedidos en esa empresa estatal, indicó Mayorga.
Para Mayorga, lo grave de todo esto es que la administración de Enacal cesanteó a los afiliados de la federación que él lidera, con el artículo 48 de la Ley del Trabajo, que establece causa justificada, por tanto, solo los liquidó con vacaciones y décimo tercer mes proporcional, pese a que el convenio colectivo reconoce como beneficios la antigüedad del trabajador hasta 25 años. Esto implica el reconocimiento salarial completo hasta los 8 años y luego 15 días por cada año trabajado hasta los 25.
La explicación que encuentra Mayorga para que la empresa y el Ministerio del Trabajo autoricen los despidos tiene que ver con que “la mayoría de funcionarios militan en UNE-FNT y lo que hacen es presionar e intimidar a los afiliados nuestros de decirles que si no se pasan a UNE van a ser despedidos”.
Uno de los casos expuestos fue el de Aracely Samudia Jarquín, quien fue despedida en diciembre pasado, tras 15 años de laborar para esa empresa estatal. Actualmente su caso está en los juzgados laborales.
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Según Samudia, a ella la estuvieron presionando en la empresa para que cambiara su afiliación sindical. “Me dijeron que si cambiaba de sindicato podía quedarme en la empresa”, afirmó Samudia.
Mayorga acudió al Mitrab este lunes 18 de abril junto con otros sindicalistas y extrabajadores de Enacal para una audiencia probatoria en el caso de José Alberto Rivera Venerio, otro que pretenden despedir. Y reiteró que a sus afiliados los despiden por no aceptar incorporarse a la UNE, de Domingo Pérez, y alegó que la mayoría de los empleados han sido despedidos sin causa justificada.
Mayorga criticó que “hay una parcialización del Ministerio del Trabajo”, la que observan no solo en la aprobación de los despidos de sus afiliados, sino en el otorgamiento de las certificaciones de los sindicatos.
“Ni siquiera te dan un dictamen y de repente te dicen, ‘tenemos orientaciones de arriba de no entregarla’”, afirmó Mayorga, quien se sumó a los señalamientos efectuados por otros dirigentes sindicales en contra de Pérez, que han reflejado los roces entre organizaciones oficialistas.
El viernes 15 de abril LA PRENSA consultó a Pérez sobre los señalamientos que le hacen sus colegas del oficialismo, pero este alegó que no existe ningún roce con la Central Sandinista de Trabajadores (CST) y que todo ha sido una manipulación. Sin embargo Mayorga dijo que Pérez “ha pisoteado” la Constitución Política de la República, que establece libertad sindical, pues según este, se quiere constituir como “una fuerza única” en todas las instituciones del Estado.
OTRO CASO
Orlando Paniagua es el secretario general del sindicato Che Guevara, afiliado a la CST José Benito Escobar; fue despedido de Enacal en diciembre del 2015.
Paniagua dice que no solo el grupo afín a Roberto González es afectado por los despidos y confirma que el único sindicato que se “salva” ahí es el de la UNE.
La causa de despido que le atribuyeron fue falta de respeto a una funcionaria. Paniagua alega que en la Inspectoría del Trabajo fallaron en su contra “en un proceso viciado, porque no había sustento jurídico para argumentar un despido por la supuesta falta de respeto”.
