Representantes de tres provincias de Corea del Norte han elegido al líder Kim Jong-un como delegado en el VII Congreso del Partido de los Trabajadores, informaron el lunes 25 de abril medios estatales, en un nuevo paso en los preparativos para este importante evento que se celebrará en mayo.
La decisión en las provincias de Yanggang, Kangwon y Hwanghae del Sur -tres del total de nueve en las que se divide este país de 25 millones de habitantes- fue tomada por unanimidad en sus respectivas conferencias previas al Congreso, según divulgó la televisión estatal norcoreana KCTV.
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Se espera que el líder sea elegido por unanimidad en todas las provincias, una acción simbólica que se considera un nuevo paso adelante en los preparativos para el que será el primer congreso del partido único en 36 años, en el que el “líder supremo” será el protagonista principal.
En su secretismo habitual, Corea del Norte no ha desvelado las fechas exactas del evento, aunque se cree que tendrá lugar en la primera o la segunda semana de mayo.
Kim Jong-un ya fue elegido la semana pasada para representar al Ejército Popular del país en el Congreso.
El régimen también mantiene una intensa campaña de propaganda para reforzar el culto a la personalidad del dictador y al Partido de los Trabajadores de cara a la cita de mayo.
Del Congreso se esperan importantes decisiones que marquen el futuro de las políticas -especialmente en materia económica- del país en un momento de fuerte confrontación con la comunidad internacional, y expertos han sugerido que Kim podría aprovechar para imponer un reemplazo generacional en las élites del país.
En el último congreso celebrado en octubre de 1980 el fundador y entonces presidente de Corea del Norte, Kim Il-sung, designó como sucesor del poder a su hijo Kim Jong-il, fallecido en 2011 y padre del actual líder.