Una acreditación es sinónimo de excelencia para las instituciones de educación superior, por eso las universidades de la región centroamericana han aumentado las solicitudes de acreditaciones nacionales o internacionales.
Así lo asegura Javier Cox Alvarado, director del Instituto de Gestión de la Calidad de la Universidad Estatal a Distancia de Costa Rica quien llegó al país junto con otros dos especialistas para evaluar el proceso de mejora que inició la Universidad Centroamericana (UCA) en su programa de Maestría en Derecho de Empresas con especialización en asesoría jurídica.
En Nicaragua las universidades públicas y privadas iniciaron un proceso de mejora para la acreditación nacional de sus programas @laprensa
— Jeniffer Castillo (@jencastillob) 28 de abril de 2016
En Nicaragua, las 55 universidades públicas y privadas que existen actualmente trabajan en sus planes de mejora para conseguir una acreditación del Consejo Nacional de Acreditación y Evaluación (CNEA).
Pero las universidades han solicitado ya acreditaciones internacionales para evaluar la calidad de sus programas académicos. Por ejemplo, la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) tiene dos carreras de pregrado acreditadas en el extranjero y en los próximos meses, la UCA tendrá la primera acreditación internacional en una maestría.
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La acreditación “es un proceso para facilitar otros procesos de gestión de la calidad dentro de ella porque se facilitan todo lo que son vínculos externos, se facilita la movilidad para estudiantes y profesores, puede conseguir más financiamiento externo por ejemplo de agencias internacionales ya que ya demostraron que cumplen con ese criterio de calidad. Yo no soy bueno porque digo que soy bueno, tengo que probarlo”, explica Cox Alvarado.
El proceso de evaluación y acreditación universitaria en el país, según explica Orlando Mayorga, presidente del CNEA, permitirá elevar la calidad de la enseñanza superior y aquellas universidades que no cumplan con los requerimientos mínimos podrían ser incluso cerradas.
SINO SE ACREDITAN DEJAN DE FUNCIONAR
Javier Cox, director del Instituto de Gestión de la Calidad de la Universidad Estatal a Distancia de Costa Rica, dice que debido a las exigencias de calidad en la región, las universidades deben acreditarse para seguir funcionando.
Por ejemplo, “en Panamá la universidad que no se acredita institucionalmente es una universidad que deja de funcionar. En Costa Rica todavía es algo involuntario la acreditación, pero en algunas disciplinas ya se ha vuelto obligatorio como en Educación, Salud e Ingenierías y las universidades que no estén acreditadas van a perder su funcionamiento pues se consideran áreas vitales del país”, dice Cox.