La situación de sequía que afecta al lago Cocibolca es tan grave que los dueños de lanchas en Granada deben hacer muchas maniobras para poder sacar los viajes a las isletas con los turistas que llegan a diario en busca de un paseo.
Según los consultados, esta situación los tiene preocupados y le piden al gobierno los apoye cuanto antes.
Mario Roblero, quien trabaja con su lancha en el muelle Terraza la Playa, dijo que les está costando mucho salir con turistas porque apenas hay medio metro de profundidad donde hay más agua, mientras que en la zona donde se detienen las lanchas han tenido que seguir excavando a mano para poder hacer canales más profundos.
Los turistas deben brincar sobre piedras para poder subir a una lancha y luego estas son remolcadas por los lancheros para llevarlas adonde haya un poco más de profundidad para navegar.
Roblero explicó que la gestión que se había realizado con la Portuaria Nacional, a inicios de abril, se vino abajo porque no hubo capacidad para pagar de un solo la cantidad que pedían para el uso de combustible de las dragas.
Habían acordado que la portuaria facilitaría la máquina y el gremio de lancheros debía pagar el combustible que andaba en unos 180,000 córdobas.
Francisco Dávila, dueño de una lancha y propietario de la Terraza la Playa, dijo que la situación de las familias que viven de ese trabajo es muy difícil porque se deben hacer esfuerzos grandes para poder garantizar los viajes, que a la vez es el medio de subsistencia de los lancheros.
HACE 22 AÑOS
Dávila explicó que este fenómeno se vio en el lago hace 22 años, pero que hasta ahora vuelven a enfrentar este serio problema.
Estimó que debería llover por lo menos un mes seguido para poder recuperar el caudal de antes.
En Granada llovió hace tres días, pero eso no fue suficiente para recuperar los niveles de navegación necesarios para el turismo, dijo Dávila.
En ese muelle trabajan ocho lancheros, pero en total son 47 cabezas de familia los que laboran en los cuatro muelles de la localidad.
“Este problema que tiene el lago se debe a la sobrexplotación que han realizado los productores de arroz en Malacatoya”, acusó el lugareño José David Lacayo.
Refirió que el río Malacatoya se ha secado porque lo usan para riego, pero al agotarse, los empresarios han excavado canales para que el caudal del lago entre a la cuenca del río para bombear el agua a los arrozales. “Es una zanganada lo que están haciendo estos señores y nadie los controla, ninguna autoridad hace nada”, señaló el señor.
Nicaragua sufre de una prolongada sequía de tres años debido al efecto del fenómeno climatológico de El Niño, que ha alejado las lluvias de todo el territorio desde 2014.
TAMBIÉN EN RIVAS
La dificultad de navegación de lanchas y barcos comerciales y con fines turísticos también afecta los puertos y atracaderos de San Jorge y la isla de Ometepe, en el departamento de Rivas. LA PRENSA ha confirmado que los capitanes de lanchas y barcos deben hacer grandes peripecias para salir y llegar de San Jorge a la isla de Ometepe y viceversa, pese a que la Empresa Nacional de Puertos ha dispuesto dos dragas para garantizar el acceso seguro de las embarcaciones a los muelles, donde algunas de las grandes embarcaciones ya han sufrido daños
1.12 Metros de profundidad y 9,251,200,000 metros cúbicos de agua ha perdido el lago Cocibolca por la sequía desde 2014, según datos de Salvador Montenegro, experto en el tema.
