Nicaragua mantiene activo sus controles de seguridad ante la posibilidad de que mareros de El Salvador pretendan ingresar al país, a raíz de la reciente ofensiva que las fuerzas de seguridad salvadoreñas han desplegado contra las pandillas.
Así lo dijo un representante de la Policía Nacional que participó en el curso sobre “Criminalidad de pandillas”, que se realizó en El Salvador ayer 2 de mayo. Uno de los objetivos de este encuentro fue reforzar los controles migratorios en Centroamérica para prevenir la migración de pandilleros salvadoreños al resto de la región.
El capitán Roger Espinal expresó que en Nicaragua no se ha detectado la presencia de pandilleros salvadoreños.
“La advertencia para los pandilleros que vayan desde El Salvador a Nicaragua es que los vamos a controlar y no vamos a permitir que permanezcan en nuestro país”, advirtió Espinal.
El representante de la policía hondureña, César Castellano, dijo que Honduras “ha reforzado los controles fronterizos para evitar el flujo de pandilleros que migran desde El Salvador”. Agregó que en las últimas semanas se incrementó el sicariato en su país y que se plantean que la causa puede ser el ingreso de pandilleros salvadoreños.
Las pandillas salvadoreñas son las organizaciones criminales más peligrosas de la región y representan una amenaza para la seguridad de los países centromericanos, coincidieron los representantes de las fuerzas policiales reunidas en El Salvador.
