Los quince años de peregrinación del pueblo de Masaya al santuario de El Viejo en Chinandega, para venerar a la Virgen del Trono, patrona de Nicaragua, fue el motivo principal para que esta venerada imagen llegara a la capital del folclor, la que fue recibida con mucha pompa y devoción por miles de masayas.
El sol y el cansancio de los fieles devotos, no fue ningún impedimento para acompañar a la fina imagen de la virgen, que es adornada con valiosas joyas, que hacen resaltar su belleza, pues el recorrido por las principales calles de la ciudad más bien fue aprovechado por los acompañantes para lanzar vivas y entonar cánticos marianos a Nuestra Señora de El Viejo.
Este 7 de mayo fue día de fiestas para los masayas, pues a pesar que la alcaldía sandinista no adornó las calles, tal como lo había prometido, fueron los propios pobladores y la Iglesia los encargados de adornar las calles con banderines, ornamentos en cada uno de los hogares por donde pasó la Virgen, asimismo fue notoria la presencia de las diferentes expresiones culturales de esta ciudad.
En medio de la multitud iba Marta Liseth González, una feligrés que entonaba cánticos marianos, y quien desde tempranas horas se apostó en la entrada de la ciudad de Masaya, para recibir a la venerada imagen, y acompañarla durante todo la tarde y noche.
“Esta visita me parece fenomenal, sobre todo para nosotros los marianos que somos grandes devotos de María, así como lo es toda Nicaragua. Aquí ni la lluvia ni el ardiente sol nos ha pudo detener para venir a venerar a la Madre Santísima, porque le hemos demostrado nuestra fe y amor. Sería bueno que acompañemos a la virgen durante su estadía en Masaya, porque siempre que se habla de María, todo el pueblo de Masaya se desborda”, dijo González, mientras se limpiaba el sudor.
El padre Edwin Román, cura párroco de la iglesia San Miguel de esta ciudad, dijo que es muy halagador que la patrona de los nicaragüenses visite esta ciudad, porque “espera que dicha visita sea para continuar celebrando la resurrección de nuestro Señor en nuestros corazones, y que no solo se quede en fervor o una manifestación externa, sino que debe de llevarnos a un cambio de corazón”, agregó el religioso.
Hoy domingo al mediodía la venerada imagen saldrá de Masaya, en donde será despedida con todos los honores. Luego se enrumba al su santuario en El Viejo Chinandega.