Implementar una filosofía de mejora continua es uno de los retos adquiridos por Ruth Useda, quien ocupa un cargo gerencial en una empresa con presencia internacional.
Useda fue una de los 28 graduados del tercer curso especializado en Tecnologías de Gestión de la Producción (TGP), que ya han recibido 63 funcionarios de empresas y estudiantes de Ingeniería.
Desde que inició el curso, Useda buscó la forma de adaptar ese conocimiento a las diferentes áreas de su vida personal y empresarial.
“Establecer pequeñas mejoras que permitan grandes cambios es una de las lecciones que nos permitirán como empresa elevar la productividad, pero lo importante es que ese conocimiento es válido para cualquier área, no solo laboral, sino también personal”, expresó Useda.
Manuel Godínez, coordinador del programa que dispuso la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) y exbecario para aprender sobre esas herramientas, dice que para elevar los niveles de rendimiento en una empresa, sea grande o pequeña, es necesario que se evalúe cómo se hacen las cosas y consideren aspectos a mejorar.
“Esa filosofía de mejora continua que viene de Japón ayuda a que las empresas eviten accidentes y sean más estables”, refirió Godínez.
ANALIZAR ES CLAVE
Godínez sostiene que las TGP fueron creadas por el JICA y lo que pretenden es solucionar problemas utilizando el ciclo: planear, hacer, verificar y actuar.
Hirohito Takata, representante del JICA en Nicaragua, dijo que ese es un método que crearon después de la Segunda Guerra Mundial y la idea es que en la industria del país tome fuerza.
Cabe recordar que en 2015 Nicaragua retrocedió nueve puestos en el Índice Global de Competitividad, al ubicarse en la posición 108, de 140 economías en estudio, mientras que en 2014 estuvo en el puesto 99 entre 144 naciones evaluadas.
El año pasado se mantuvo la puntuación de 3.8 que acredita el estudio elaborado por el Foro Económico Mundial.