Luego de reconocer el riesgo de que las aguas pluviales que caen en la antigua mina de hormigón de Las Piedrecitas se infiltren a la Laguna de Asososca y la contamine, Fidel Moreno, secretario general de la Alcaldía de Managua, explicó que tienen elaborado un proyecto que de desarrollarse ya no habría amenaza.
Moreno manifestó que además de evitar esta infiltración peligrosa a esta fuente de agua potable, quedarían en la historia las anegaciones en la 35 Avenida y las casas ubicadas en la zona en los tiempos de los aguaceros.
La obra consiste en la construcción de una caja túnel desde el hormigón hasta el lago Xolotlán, cuya trayectoria estaría en la propia 35 Avenida, la que constantemente queda intransitable al levantarse los adoquines con las corrientes.
“Es un canal de trasvase que va sobre la 35 Avenida con una sección más o menos de 20 metros cuadrados, realmente es un gran túnel que tenemos diseñado y que entraría por el sector de Acahualinca, hacia el lago”, detalló el funcionario.
Pero para que sea ejecutado, la comuna primero debe asegurar una fuente de financiamiento que ascienda los 15 millones de dólares. Moreno, quien no aclaró si ya está garantizado el presupuesto, dijo que lo están trabajando con el Banco Interamericano de Desarrollo (BCIE).
Para el experto en recursos hídricos y fundador del Centro para la Investigación de los Recursos Acuáticos (CIRA-UNAN), Salvador Motenegro Guillén, “cualquier obra civil que evite la descarga de aguas pluviales y residuales en la laguna de Asososca es positiva”.
LA PRENSA constató la existencia de una débil corriente de aguas negras en el drenaje pluvial que desemboca en la antigua mina de hormigón, a pesar que Moreno afirmó que en ese sistema de drenaje pluvial no hay conexiones de aguas negras.
Sobre esto, Montenegro Guillén consideró que “es inevitable que se mezclen las aguas residuales y las pluviales, especialmente en eventos de precipitación intensa como los que suelen ocurrir en Managua”.
El suelo en esa zona de la antigua mina de hormigón es de escoria volcánica, esto lo convierte en un suelo permeable y con alta capacidad de infiltración.
“Ese tipo de suelo, carece de cualquier capacidad de filtración y de reducción de riesgo de las sustancias indeseables contenidas en los residuales que son arrastrados por las aguas pluviales”, explicó Montenegro Guillén.
Nicaragua posee la Ley General del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Ley 217), que en sus primeros artículos plantea la necesidad de “prevención, regulación y control de cualesquiera de las causas o actividades que originen deterioro al medio ambiente y contaminación de los ecosistemas”.
Teniendo en cuenta este mandato de la ley, Montenegro Guillén afirmó que “las autoridades municipales tienen la obligación de evitar por todos los medios a su alcance, el factor de descargar aguas pluviales que inevitablemente están contaminadas con aguas servidas y desechos de naturaleza diversa en Asososca”.
ASOSOSCA PARA BEBER
Asososca es una laguna cratérica que fue declarada reserva natural en octubre de 1991. Tiene un perímetro de seis kilómetros y una profundidad máxima de 98 metros.
Según el texto Áreas protegidas de Nicaragua, elaborado por el biólogo Fabio Buitrago, Asososca tiene una forma casi circular y 1.2 kilómetros de diámetro.
Asososca es un nombre que deriva del náhuatl atlxouxouhqui-ca, que se traduce por “lugar del agua azul”.
Las aguas de Asososca son explotadas para el abastecimiento de agua potable desde 1914, y según estimaciones varias, abastece a entre el 10 y 15 por ciento de la población de Managua, aunque el secretario general de la
Alcaldía de Managua, Fidel Moreno, afirmó que es el 25 por ciento de los managuas.
1.8 metros de diámetro tienen las tuberías de aguas pluviales instaladas para canalizar el agua de lluvia que cae en os barrios Mirna Ugarte y Ayapal y que esta se depositen en donde fue la mina de hormigón, frente a Asososca.