Nuevamente corre sangre en la microrregión de Ayapal, tras el asesinato de Eddy Jarquín, joven de 23 años, quien vivía en la comarca de Kayasca.
El hecho ocurrió el pasado 12 de mayo a las 11:00 de la noche, según informó la Policía del departamento de Jinotega, en el norte de Nicaragua.
Fue el padre del joven, Isidoro García Hernández, quien interpuso la denuncia, en la que se apunta a tres personas como presuntos autores del asesinato: Antonio Benavídez, de 75 años; Víctor Laguna, de 70 años, y María Elena Martínez Ramírez, de 45 años.
El padre de la víctima informó a la Policía de Jinotega que los sospechosos se presentaron a la casa del joven y le dijeron que saliera. Luego fue apuntado por Benavídez con una escopeta, quien al mismo tiempo lo acusó de la muerte de otro joven. Le disparó en el estómago. Luego, Víctor Laguna le disparó en la cabeza.
¿PASADA DE CUENTAS?
El padre de la víctima explicó que el 10 de mayo, en la comarca Kantayawás, sector El Ojochal, mataron de una puñalada a Erick Uriel Torres Martínez, hijo de María Elena Martínez. Del asesinato de Martínez acusaron a Eddy García, el ahora occiso.
Antes de que le dispararan en la cabeza García detalló que su hijo negó haber matado al joven y que lo estaban matando injustamente.
Ante el asesinato de su hijo García entró a la casa con su familia mientras los presuntos autores pateaban la puerta.
Fue hasta las 5:00 de la mañana, seis horas después del crimen, que pudo salir solo para encontrar el cadáver de su hijo Eddy.
La Policía sigue investigando el hecho. Se dirigieron al lugar del asesinato para hacer las pruebas correspondientes, al allanar la casa donde habitaban los presuntos asesinos se dieron cuenta de que estos ya habían huido.
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