Junto con sus habilidades en el campo, Cheslor Cuthbert ha mostrado el temperamento y la vitalidad para militar en el beisbol de las Grandes Ligas.
A través de 13 partidos ha probado que pertenece a las Mayores. Ha suplido a un jugador tan importante como Mike Moustakas, y lo ha hecho a la altura, con nivel.
Su bate ha estado caliente. La manopla ha atrapado lo que se mueve y su instinto ha lucido agudo. Salvo un día que se durmió al intentar anotar, ha sido muy juicioso.
Todo eso está bien. El problema es que Mike Moustakas está a punto de volver, tan cerca como este fin de semana. De hecho ayer, ya bateó en AA y se fue de 4-2.
Moustakas es, junto con Eric Hosmer, uno de los pilares en los que descansa el talentoso equipo de Kansas City, que es además, joven. Así que una vez de regreso, debe jugar.
¿Qué pasará con Cuthbert? Preguntaron al mánager de los Royals, Ned Yost. “Esa es una decisión dura”, contestó el mentor al The Kansas City Star, claro de que su hombre para la tercera es Moustakas.
Sin embargo Cheslor lo ha hecho tan bien que merece que le abran un lugar. ¿Dónde? Podría ser en segunda, pero ahí está Omar Infante, veterano de influencia y firmado hasta el final del 2017.
“Cuthbert ha tomado rolas en segunda, pero además de Infante, los Royals tienen ahí a Christian Colón, quien ofrece versatilidad en tercera, segunda y short”, señala Blair Kerkhoff, de The Star.
Lo más probable es que al nica lo envíen a AAA. El juego de Cheslor irá creciendo pero si está jugando. En el banco es difícil que avance. Pero como ha admitido Yost, les ha puesto difícil la decisión.
Está claro, que además de sonreír con naturalidad, el chavalo juega bien al beisbol.