En la ruta hacia futuros peleadores que podrían causar sorpresa en el boxeo internacional están Félix “El Gemelo” Alvarado y Roberto Arriaza. En las nuevas clasificaciones de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) se encuentran bien posicionados.
El primero porque recientemente pidió su reclasificación de las 112 a las 108 libras y le fue otorgada, quedando como el peleador número cinco cerca del rey del trono Ryoichi Taguchi, campeón de esa categoría, mientras que inesperadamente “Dinamita” Arriaza consiguió ser colocado como número 10 en las 147 libras, donde el campeón es Keith Thurman.
Alvarado tiene grandes posibilidades de ser campeón mundial, tiene las herramientas necesarias en este boxeo dramático y vacío. En las 108 libras no existen súper boxeadores, sino púgiles que con lo justo sobreviven, a la misma vez cambia esa categoría constantemente de monarca.
En los últimos cuatro años ese cetro le perteneció a Román “Chocolatito” González, Arberto Rossel, Kazuto Ioka, Randy Petalcorin y ahora a Taguchi, el japonés que tiene 22 triunfos, 2 derrotas y un empate, además que una de sus derrotas fue propinada por el conocido Naoya Inoue, actualmente campeón de las 115 libras de la Organización Mundial de Boxeo.
Por su parte, Arriaza está en una jaula de fieras. Logró hacer lo que parecía complicado: entrar en las clasificaciones de las 147 libras, un peso lleno de peleadores de mayor nivel, como son Danny García, Kell Brook y el mismo Jessie Vargas, quienes se dividen las coronas de los demás organismos.
Arriaza aún necesita madurar en el boxeo, sus 12 peleas son una muestra de lo que puede proyectar y en lo que está en la actualidad. Tiene pegada y eso lo puede llevar a niveles insospechados, no obstante, tiene el hambre de mejorar y su estancia en Los Ángeles lo ha hecho evolucionar hacia otro nivel.