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Zona de Strikes: La grieta en el perfil de Lionel Messi

Messi es genial, pero no triunfar con Argentina, lo sitúa en desventaja respecto a Pelé y Maradona, los patrones por los que aún se mide a los futbolistas. Lo demás, es discusión estéril.

Edgard Rodríguez C. Pelé quería siempre el papel estelar y lo asumía con esa naturalidad que identifica a los grandes. Sin importar el escenario, desplegaba su talento e impactaba al mundo, como si jugara en la favela.

Maradona dramatizaba el futbol. Corría como si el balón estuviera pegado a sus pies. A veces lo mostraba, a veces lo escondía, pero no lo soltaba. Y se metía a la línea enemiga con determinación kamikaze.

Pero además de tener un talento genial, Pelé y Maradona, entraron profundo en el sentimiento popular por lo que lograron con sus habilidades y fortaleza temperamental.

El brasileño hizo época en el Santos y se adjudicó tres Copas del Mundo. El argentino hizo de un Nápoles mediocre, un club de presencia en Europa incluso y llevó a la cima a su país en México 86.

¿Y Lionel Messi? Es también un fuera de serie. Es un futbolista que despierta admiración planetaria. Su futbol exquisito y su regularidad con el Barcelona, lo sitúan junto a los grandes.

Pero sus tropiezos con Argentina y no haber levantado una Copa Mundial provocan una hendidura en su perfil. Es su asignatura pendiente y parece que esa grieta así se quedará.

Es una situación similar a la de Cristiano Ronaldo, otro formidable jugador de esta época, de impacto casi nulo con Portugal, donde a diferencia de Messi, tiene menos compañía de talentos.

Expertos dicen que Messi no necesita ganar un Mundial para ser el mejor de la historia. Pregunto, ¿si el talento no te da para ganar, entonces para qué sirve? Al final, tu obra habla por vos.

Pelé y Maradona triunfaron sobre el mejor escenario que el futbol puede levantar, como son las Copas Mundiales. Porque de eso se trata. Los Mundiales son para proclamar la diferencia entre los genios y los demás.

Messi es genial, pero no triunfar con Argentina, lo sitúa en desventaja respecto a Pelé y Maradona, los patrones por los que aún se mide a los futbolistas. Lo demás, es discusión estéril.

El talento debe servir para algo, para ganar.

Deportes Diego Maradona Lionel Messi Pelé archivo

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