El término “LGTBfobia”, que alude al rechazo al colectivo de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales y que parte de una sigla que actúa como base léxica a la que se le añade el elemento compositivo “-fobia”, está bien formado en español al igual que su forma desarrollada “elegetebefobia”, señala la Fundación del Español Urgente, promovida por la Agencia EFE y BBVA.
De forma aislada, la aversión a cada uno de estas expresiones sexuales y a sus colectivos se denomina “lesbofobia”, “homofobia”, “transfobia” y “bifobia”.
El hecho de que el elemento compositivo “-fobia” esté en posición final hace que se escriba unido a la sigla, sin necesidad de guion o de espacio.
En algunos medios de comunicación se pueden leer informaciones como La herramienta sindical contra la LGTB-FOBIA… o Una obra cuyo fin era convertirse en una herramienta para prevenir la LGTB fobia, cuando lo adecuado habría sido optar por escribir “LGTBfobia”: La herramienta sindical contra la LGTBfobia… o Una obra cuyo fin era convertirse en una herramienta para prevenir la LGTBfobia.
Aunque la sigla “LGTB” es la más frecuente en los medios para referirse de manera genérica a estos colectivos, es habitual encontrar variantes como “LGTBI” (en la que la última letra es la inicial de “intersexuales”) o cambios de orden (“LGBT” o “GLBT”) que, como indica el “Diccionario gay-lésbico” de Félix Rodríguez, se utilizan para dar mayor protagonismo a un grupo determinado.
En todos los casos, el sustantivo que alude al rechazo a esos grupos puede formarse asimismo mediante la adición de “-fobia” a la sigla correspondiente: “GLTBfobia”, “LGTBIfobia”…
Este tipo de composiciones no por ser novedosas en español son incorrectas, pese a que, como en este caso, las siglas que sirven de base léxica sean una sucesión de consonantes. Fundéu BBVA (www.fundeu.es).