El gremio médico ha sido golpeado después de que este viernes pasado se conociera el fallo de culpabilidad en contra del doctor David Páramo por homicidio imprudente en perjuicio de su paciente Lizandra Jarquín. Para la Asociación Médica Nicaragüense (AMN) el acto médico fue criminalizado y juzgado de forma incorrecta.
Páramo fue procesado por violar las normas elementales del debido cuidado, no cumplió con el consentimiento informado, valoró mal a la paciente, sobrepasó el límite de extracción de grasa y aumentó el riesgo de muerte de Lizandra Jarquín, según la juez Iveth Pineda, titular del Juzgado Sexto Penal de Managua.
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El doctor Ricardo Pineda, fiscal de AMN, considera que el dictamen forense tiene falta de rigor científico y pareciera que le practicaron una autopsia al expediente clínico y no al cadáver de la víctima, porque no queda claro qué le causó la embolia de grasa masiva a Lizandra Jarquín.
Pineda afirma que el Ministerio de Salud (Minsa) no respetó la normativa para realizar auditorías médicas, porque el Instituto de Medicina Legal no practicó una autopsia con rigor científico.
Según el artículo 155 de la normativa del Minsa, las comisiones que realizarán las auditorías estarán integradas por profesionales pares a la especialidad y externos al establecimiento de salud que se va auditar, contando como mínimo tres, según la complejidad del caso. Además, se solicitará a la AMN la designación de al menos un miembro debidamente acreditado.
Sin embargo, esto no se cumplió en el caso de Páramo, dijo el doctor Pineda. “Una cosa es buscar la verdad y otra es buscar culpable. Si la Fiscalía tenía un caso sólido por qué recurrieron a ilegalidades, por qué no hicieron las cosas correctas”, agregó.
Pineda dijo que un estudio científico hubiese determinado dónde ocurrió la lesión que provocó que la grasa llegara al torrente sanguíneo de Jarquín, lo que hubiera demostrado la baja incidencia de Páramo en su muerte.
Sin embargo, la familia de la víctima calificó como positivo el proceso ya que se está castigando a un médico de negligencia médica y esto podría sentar un precedente para que no se repitan casos similares. “Gracias a Dios por permitirnos hacer justicia. Yo sé que esto no me va a regresar a Lizandra (Jarquín), pero no nos podíamos quedar callados”, dijo Lester Rodríguez, viudo de la víctima.
El médico internista Vicente Maltez Montiel dijo que el ejercicio profesional médico quedará impregnado de desconfianza, temor y encarecimiento, porque se apelará a mas exámenes y estudios para una mayor seguridad. “Resulta seriamente dañada la autoestima profesional médica. La capacidad y compromiso del médico de ser altruista estará erosionada”, agregó.
Las 24 asociaciones que integran AMN sostendrán una reunión para ver el tema de Páramo, en vista de que consideran que el juicio dejó más interrogantes que respuestas. “Juzgaron sin la intervención de peritos calificados y si así le hicieron a Páramo, así seguirán juzgando, criminalizando a los médicos y esto hace que estemos en indefensión, ¿por qué no le aceptaron los peritos privados a la defensa y ser juzgado en igualdad de condiciones? el Minsa no respetó su propia normativa. Tienen un culpable, pero no se sabe qué pasó en el quirófano con Lizandra y eso no es justicia”, dijo el representante de AMN.