Más de 500 pasajeros y tripulantes tuvieron que ser desalojados de un crucero que se incendió este miércoles cerca de la costa norte de Puerto Rico, y muchos de ellos necesitaron atención médica, aunque no hubo muertos ni heridos graves.
El incendio ardía mientras cientos de personas se deslizaban por toboganes de emergencia desde el Caribbean Fantasy, una combinación de crucero y ferry.
Luego, botes de la Guardia Costera de Estados Unidos llevaron a los pasajeros al puerto de San Juan mientras helicópteros sobrevolaban la zona.
Otras agencias e incluso navíos privados ayudaron al desalojo, al tiempo que se solicitó a los bomberos que salieran del barco por su propia seguridad.
“Fue como algo de película”, dijo la pasajera dominicana María Prensa, de 64 años, mientras se enjugaba las lágrimas. “Estaba recogiendo mi equipaje y olí humo. Pregunté y me dijeron de no era nada, que estaba bajo control”.
Los pasajeros, en su mayoría dominicanos, incluían decenas de deportistas escolares que iban a participar en eventos en Puerto Rico, entre ellos un equipo ciclista, uno de vóley femenino y uno de béisbol masculino.
Los buques cruzan varias veces por semana entre Puerto Rico y República Dominicana.
El fuego comenzó en la sala de máquinas y aparentemente ya llevaba cierto tiempo ardiendo antes de que se hiciera sonar la alarma.
Gyno Funes dijo a The Associated Press que era uno de dos mecánicos que estaba en la sala de control cuando una manguera de combustible se reventó y se prendió.
“Estuvimos como unas dos horas luchando, tratando de extinguirlo, pero no pudimos”, dijo el otro mecánico, Marlon Doblado, después que ambos llegaron a tierra.
Representantes de American Cruise Ferries, la empresa que opera el barco de bandera panameña construido en 1989, no devolvieron los mensajes que se les enviaron para solicitarles sus comentarios sobre el incendio.
Las autoridades federales están entrevistando al capitán, dijo Ángel Crespo, director de la Agencia Estatal para el Manejo Emergencias de Puerto Rico.Ricardo Castrodad, vocero de la Guardia Costera, indicó que la agencia inició una investigación sobre las causas del fuego, aunque es demasiado pronto como para decir qué le ocurrirá al barco, que permanecía encallado.
Una investigación de la agencia de noticias ProPublica, sin fines de lucro, había descubierto 107 deficiencias durante 61 inspecciones al crucero desde 2010.
LESIONADOS ENTRE DESALOJADOS
Las inspecciones más recientes no hallaron problemas importantes, pero en una inspección de enero de 2015 se afirmó que las mangueras de combustible deberían ser examinadas o protegidas de alguna forma con el fin de evitar cualquier fuga hacia las fuentes de ignición.
Crespo informó que 105 personas fueron atendidas en el lugar, la mayoría por insolación, deshidratación y choque nervioso, mientras que otras 24 habían sido hospitalizadas.
Entre éstas estaban tres mujeres con los tobillos dislocados y un hombre que se fracturó la pierna al deslizarse por el tobogán de emergencia. Ninguna de las lesiones es grave, y se espera que todo el mundo se recupere, agregó.
En los muelles varias decenas de personas fueron transportadas en camillas, en una de las cuales estaba un hombre a quien suministraban suero mientras sostenía un bebé que lloraba y sólo traía puesto su pañal.
A los lesionados les siguió un pequeño grupo de niños tomados de la mano mientras desembarcaban de botes de la Guardia Costera.
Los pasajeros aún estaban llegando más de cinco horas después de que se reportara el fuego.Los pasajeros sin problemas de salud fueron colocados en autobuses para ser llevados al destino original del buque, donde pasaron por la aduana.
Entre ellos estaba Fiordalise Pitchard, quien viajó a Puerto Rico de vacaciones.”Me siento nerviosa”, dijo mientras le temblaban las manos. “Estaba en el restaurante cuando vi el humo. Estoy dándole la gloria al Señor el día de hoy”.Parientes angustiados se abrieron paso para llegar al lugar.
Hilda Pereira dijo que su hija, a quien no veía desde hace 14 años, estaba en el buque. Pereira indicó que estaba en el salón de belleza cuando recibió una llamada de su hermana, quien le dijo “sé fuerte. El ferry cogió fuego”.