14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.
Gisella Canales Ewest

Quiero salir de mis deudas, ¿por dónde empiezo?

No hay una fórmula mágica que se pueda o deba aplicar a todos los casos de endeudamiento, cada uno de ellos es distinto y debe valorarse por separado. Aquí le muestro varios aspectos que debe tomar en cuenta para que usted analice su caso y decida por dónde comenzar.

No es necesario caer en el sobrendeudamiento para idear un plan de pago de las deudas. Así que si ya calculó su nivel de endeudamiento y está en el límite de lo sano o ya lo sobrepasó, no deje transcurrir mucho tiempo para actuar.

De entrada quiero aclarar que no hay una fórmula mágica que se pueda o deba aplicar a todos los casos de endeudamiento, cada uno de ellos es distinto y debe valorarse por separado. A veces se recomienda empezar por las deudas pequeñas para luego atacar las grandes, pero con esa receta no se estaría atendiendo el problema de raíz ni se sentiría un alivio real. Aquí le muestro varios aspectos que debe tomar en cuenta para que usted analice su caso y decida por dónde comenzar.

-Haga un inventario de sus deudas. Lo primero es estar claros de nuestra situación, pero ello no significa solo enlistar cuánto debemos, sino detallar el monto de la deuda, tasa de interés anual y mensual y la cuota o pago de la misma. Una vez que tengamos claro el panorama, será más fácil identificar por dónde empezar.

Recomendado: Sobreendeudados: cuando quejarse ante las autoridades sí hace la diferencia.

—Valore su situación. El problema no necesariamente puede ser el monto de la deuda, sino qué implica para nosotros su pago y cuánto nos cuesta. Por ejemplo: no es lo mismo deber 10,000 dólares por un crédito hipotecario —que paga una tasa de interés anual no superior al 10 por ciento (0.8% mensual)—, que deberlos a tarjetas de crédito, cuyas tasas en córdobas llegan hasta el 50% anual (4.16%).

Sobre todo debe identificar si quiere salir de deudas porque los pagos ya se le hacen imposibles, o si simplemente quiere pagar menos intereses y en menor plazo, pero las cuotas no comprometen su presupuesto.

Si su caso es el primero, su prioridad debe ser reducir los créditos más caros, aquellos por los que pague elevados intereses. ¿Por qué? Porque conforme empiece a mermar esas deudas, por ser intereses tan caros sentirá rápidamente el alivio y pagará menos.

Lea también: Niñez de hoy, adultos con problemas financieros de mañana

—Analice a conciencia su presupuesto. Si no está claro de cuánto realmente puede pagar, difícilmente podrá decidir con claridad. Aquí es necesario formular un presupuesto austero, de modo que pueda destinar la mayor cantidad posible al pago de deudas. ¿Por qué le recomiendo esto? Porque de nada serviría que destine el 90% de sus ingresos para pagar deudas si con el 10% restante no logra cubrir sus gastos básicos y tendría que recurrir a más deudas para ello.

—Revisar las garantías y riesgos. Independientemente si su deuda es con un banco o un prestamista, también debe poner sobre la balanza qué garantías dio por ese crédito. Ya sea que alguien le firmó como su fiador, si puso de garantía su vivienda o si el aval es su salario, debe sopesar qué pasaría si esa deuda se le convierte en impagable y con base en ello meditar su decisión.

Un préstamo entre particulares acordado de forma verbal no va a representarle el mismo riesgo que uno que le implique un embargo salarial. Y si una de sus deudas es en algún servicio básico como electricidad o agua, o tiene cuotas atrasadas en el pago de su casa, debe ser prioridad por las serias implicaciones que tendría su impago.

No deje de leer: Al contraer un crédito: ¿tasa fija o tasa variable?

—Indague si puede hacer cambios en esas deudas. Por ejemplo, si tiene varias tarjetas de crédito a tope y con dificultad puede hacer los pagos mínimos, es más saludable hacer un préstamo personal o un refinanciamiento (a tasas que por lo general son la mitad que las de las tarjetas). Sí, al final lamentablemente deberá lo mismo, pero con otras condiciones de pago que podrían liberarle importantes sumas de dinero de sus ingresos.

Revisemos nuevamente la lista del punto 1 y veamos si es posible renegociar las condiciones de pago.

—¡No se siga endeudando! Este es el punto más importante de todos. Si está decidido a pagar sus deudas y evitar una situación calamitosa, debe dejar de adquirir más deudas o será un círculo del cual no podrá salir. Por el contrario, es momento de buscar fuentes de ingresos adicionales.

Lea también: ¿Quiere un crédito?, lea esto

 

(*) Editora de Activos
www.delepesoasuspesos.com
Facebook: delepesoasuspesos
[email protected]

Economía Dele peso a sus pesos archivo

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí