Con la cada vez más próxima entrada en operación de los canales de televisión digital terrestre, en la región centroamericana, se libera un importante bloque de frecuencias en la banda de 700 MHz. Esta banda de frecuencias se conoce como el “Dividiendo Digital”.
El espectro de frecuencias radioeléctricas liberado ha puesto a disposición de los servicios móviles dos posibles bandas de frecuencias: 790-862 MHz (también conocida como la banda 800 MHz), usada en la Región 1 UIT-R (que incluye a Europa, África y Oriente Medio), y 698-806 MHz (o banda 700 MHz), usada en la región 2 UIT-R (América) y en la Región 3 (Asia-Pacífico).
El “Dividendo Digital” se debe a que los sistemas de compresión digital permiten multiplexar la transmisión de varios programas de televisión en el espectro utilizado anteriormente por un solo canal de televisión analógico y liberan de uso una parte sustantiva de las bandas de frecuencias originalmente asignadas. En nuestro caso, la banda de 700 MHz, que es idónea para los servicios móviles, puesto que ofrece unas buenas características de propagación, una capacidad razonable y una disponibilidad en bloques suficientes que permite el uso eficaz del espectro radioeléctrico para servicios soportados en redes de banda ancha.
Otra de sus características relevantes es su capacidad de penetración “indoor”, es decir, al interior de edificios y construcciones a diferencia de bandas de mayor frecuencia. Estudios del Small Cell Forum indican que el 50 por ciento del tráfico de voz y alrededor del 80 por ciento del tráfico de datos móviles se cursa en entornos cerrados (indoor). En este sentido, las bandas bajas, menores a 1000 MHz tienen una mayor penetración en estos espacios, ofreciendo un equilibrio excelente entre la capacidad de transmisión y la cobertura geográfica.
Esta banda de frecuencias se puede utilizar en la prestación de servicios de comunicaciones móviles, entre ellos, acceso inalámbrico a internet de banda ancha y solamente se obtendrán todos los beneficios sociales y económicos del dividendo digital si ese espectro de frecuencias se atribuye de manera justa y equilibrada, aprovechando así sus beneficios para todos los usuarios. Desde luego, los beneficios económicos de la asignación de este espectro a las redes móviles son mucho mayores que los que aportaría la asignación a cualquier otro servicio.
El “Dividendo Digital”, en particular la banda de 700 MHz para el caso de Nicaragua, es un elemento clave para lograr el acceso universal a la banda ancha, lo que derivaría en beneficios socioeconómicos para los habitantes de las ciudades y de las zonas rurales y aisladas, en las que la penetración de las líneas fijas es baja. Es razonable imponer ciertas obligaciones de cobertura a fin de garantizar un uso eficiente de este espectro y desde luego, la armonización regional de la banda es necesaria para impulsar economías de escala (mantener bajos los costos de los teléfonos celulares) y evitar interferencias en las fronteras nacionales.
Los Estados y Gobiernos, como un aporte a la inclusión digital del ciudadano, no deben tratar de recaudar tasas demasiado altas por las licencias del espectro en la banda de 700 MHz., puesto que eso tendría un efecto negativo sobre el despliegue de la red, aumentaría los precios para los consumidores y limitaría los potenciales beneficios económicos. Unas tasas excesivas también podrían impedir que se alcanzasen los objetivos políticos de brindar acceso universal a la banda ancha móvil.
Asimismo, una gestión del espectro eficiente y eficaz es indispensable para ello. Todos los sectores interesados deben tener muy clara esta cuestión cuando desarrollen sus estrategias para los próximos años.
Consultor*