La dictadura comunista de Cuba le otorgó el título oficial de “héroes cubanos”, a los cinco espías que fueron enviados a Estados Unidos (EE. UU.) para infiltrarse en las organizaciones de los contrarrevolucionarios e informar sobre sus planes y actividades conspirativas.
Los espías cubanos fueron capturados en Estados Unidos, en septiembre de 1998; procesados bajo los cargos de espionaje, conspiración para cometer asesinatos y ser agentes de un gobierno extranjero, y condenados a penas de 15 a 30 años de prisión. Varios años después todos ellos fueron puestos en libertad, el primero en octubre de 2011, el segundo en febrero de 2014 y los otros tres en diciembre de ese mismo año, en el cálido ambiente del restablecimiento de las relaciones diplomáticas y políticas entre los gobiernos de ambos países.
Al regresar a Cuba, los cinco espías fueron aclamados como héroes y paseados por la isla en marcha triunfal. Además fueron recibidos en países de gobiernos afines a la dictadura comunista de Cuba, como el de Nicaragua, que los agasajó oficialmente y premió como héroes de la lucha contra el imperialismo, como de manera obsesiva Daniel Ortega llama a los EE.UU., el principal socio comercial y económico del país.
No cabe duda de que los cinco espías cubanos realizaron en EE.UU. una misión muy valiosa para el gobierno de Cuba. Son héroes de la dictadura comunista de ese país y como tales los reconocen también sus seguidores y admiradores en todas partes del mundo.
Sin embargo ellos no son héroes de los cubanos que repudian —de manera activa o pasiva— a la dictadura de partido único, que quieren libertad de prensa, sindicatos independientes, pluralismo político, economía de mercado libre, Estado de derecho, división de poderes, etc.
Para quienes aman y quieren la libertad, un verdadero héroe cubano es Guillermo Fariñas, el activista opositor que en este momento lleva más de un mes en huelga de hambre en protesta contra la represión.
Fariñas (psicólogo, periodista y escritor) ha protagonizado 23 huelgas de hambre en su lucha por la libertad y la democracia para Cuba. Ha sido encarcelado en tres ocasiones sumando casi 12 años de prisión. Por eso mismo Fariñas ha merecido el reconocimiento de la comunidad democrática internacional, que lo ha distinguido con valiosos galardones como el Premio Sájarov de la Libertad que otorga la Unión Europea, entre otros.
Quienes luchan para sostener y defender a una tiranía no son héroes, sino villanos. Guillermo Fariñas sí es un auténtico héroe cubano.
Héroes son los que luchan hasta el sacrificio de sus vidas para que en su país haya libertad, el objetivo más grandioso por el cual puede y debe luchar una persona, y hasta dar la vida por ella, como lo expresara con hermosas palabras el escritor español Miguel de Cervantes, por la boca de Don Quijote de la Mancha.
El solo hecho de soportar durante casi seis décadas una dictadura como la de Cuba, es una actitud heroica de quienes tienen conciencia de su dignidad humana y, por lo tanto, del valor y la necesidad de la libertad. Y mucho más heroico es sacrificarse hasta la auto inmolación por esa causa, como lo está haciendo Guillermo Fariñas.