Movilizarse una cuadra de rodillas y acompañar a Santo Domingo de Guzmán de Abajo durante sus recorridos, es la promesa que Juan Carlos López hizo por un milagro recibido.
López fue detenido y condenado a veinte años de prisión, pero su vida cambió cuando logró demostrar su inocencia y quedar en libertad.
Ahora, este hombre que promete “componerse y dedicarse a las cosas de Dios” es parte de los devotos y promesantes que participaron del recorrido casa a casa que el santo realizó ayer sábado en su despedida por el barrio Cristo del Rosario.
Milton Chévez, encargado de la Pastoral de Cargadores, explicó que Santo Domingo de Abajo inició su visita desde el pasado siete de agosto a la Iglesia Cristo del Rosario. “Luego de quince días, se despide realizando desde ayer sábado un recorrido por el barrio que dura aproximadamente entre doce y trece horas”.
Durante este recorrido algunos promesantes como Aydalina Guerrero, otorgan un brindis a los que participan de la celebración, mientras otros solo piden que se baile al santo. Son ochenta miembros de la Pastoral de Cargadores Cristo del Rosario que este año se suman a la tradición, que de acuerdo a Chévez, tiene 113 años de realizarse.
Hoy domingo es la actividad principal de despedida que inicia con la santa misa a las 6:00 a.m., posteriormente la imagen realiza un recorrido por las principales calles del barrio y a las 11:00 a.m. Santo Domingo de Abajo se entrega en el Puente León a los fieles de SanAndrés de la Palanca.