La policía migratoria costarricense ha devuelto a Panamá, durante el mes de agosto, a 239 cubanos que ingresaron de modo irregular a ese país como parte del periplo que hacen desde el sur del continente hacia Estados Unidos.
Según la Policía Profesional de Migración, 173 cubanos fueron devueltos a través del puesto fronterizo de Paso Canoas y 66 por Sabalito, ambos puntos fronterizos con Panamá; en apego a lo expresado por el gobierno tico de rechazar a todas aquellas personas que se encuentran irregulares en el territorio nacional.
“Mantenemos el respeto a los derechos humanos de las personas extranjeras y de la legislación migratoria. Las personas cubanas deben presentar visa para el ingreso al país y quien no reúna los requisitos correspondientes, se le rechazará su entrada al territorio, promoviendo así una migración ordenada y segura”, señaló Gisela Yockchen, Directora General de Migración y Extranjería de Costa Rica.
“En este momento no tenemos ingreso para personas nacionales de Cuba. Estas personas son rechazadas en el puesto migratorio o son rechazadas por la Fuerza Pública no permitiendo su ingreso desde la raya fronteriza”, añadió Yockchen.
Cerca de 600 cubanos se encuentran varados en Panamá. La mayoría se encuentran viviendo en condiciones infrahumanas en La Miel, frontera con Panamá.
La madrugada de este jueves la Policía Profesional de Migración deportó a una segunda persona nacional de Haití, por encontrarse de forma irregular en el país al no haberse sometido a su ingreso a los controles migratorios que Costa Rica tiene en la frontera con Panamá, para regularizar su entrada.
El haitiano, de apellido Courageux fue remitido desde Liberia, norte de Costa Rica, por oficiales de Migración, después de ser ubicado sin portar documentación de ingreso regular al país o un permiso de ingreso y tránsito que está siendo otorgado en la frontera de Paso Canoas.
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Desde el 11 de julio permanecía en el Centro de Aprehensión Temporal para Extranjeros en Condición Irregular en Hatillo, San José, a la espera de la corroborar su identidad, así como verificación de alerta en los sistemas migratorios o Interpol, para luego proceder con el proceso de deportación.
Costa Rica mantiene abierto diferentes centros de atención para personas migrantes, los cuales están ubicados en Paso Canoas y Buenos Aires, zona sur; y en Peñas Blancas, frontera norte.
También tiene abierto el proceso al que se deben someter los migrantes haitianos y extracontinentales al ingresar al país, a través del cual se les otorga el permiso de ingreso y tránsito por 25 días de permanencia regular en el país.