Los alimentos son compuestos químico naturales que contienen sustancias nutritivas. Las medicinas son también compuestos químicos creados por la industria farmacéutica. Ambos compuestos pueden interactuar en el cuerpo y afectar la nutrición y eficacia del medicamento de diversas formas.
Las cuatro principales interacciones que pueden alterar la nutrición son: cambios en el apetito, en la absorción, en la utilización y en la velocidad en que pasan las sustancias nutritivas a través del intestino.
Los medicamentos pueden alterar el apetito, incrementándolo o disminuyéndolo, también pueden alterar el sentido del gusto y el olfato, causar náuseas, vómitos, estreñimiento o diarrea y consecuentemente afectar el consumo de alimentos.
Algunas medicinas, como los antibióticos, pueden ocasionar dolor de estómago, otros, como los antireumáticos pueden causar irritación gastrointestinal.
Algunas interacciones entre alimentos y medicinas son muy conocidas, por ejemplo: la leche inhibe la absorción de la tetraciclina, del hierro y de antiácidos que contienen magnesio, no quiere decir que la leche se deba suprimir si tiene indicado alguno de ellos, sencillamente debe tomarla al menos con dos horas de intervalo entre el medicamento.
Otra de las interacciones conocidas es que el jugo de naranja, limonada y alimentos ricos en vitamina C favorecen la absorción del hierro. El té y café por el contrario, al igual que la leche, inhiben su absorción.
En distintas ocasiones he mencionado que los vegetales verdes, ricos en vitamina K, no se deben consumir cuando se toma warfarina como anticoagulante porque inhibe su eficacia. El ajo más bien puede potenciar su efecto.
Las grasas favorecen la absorción de suplementos de vitaminas solubles en grasa como vitaminas A, D, E y K, pero disminuyen la acción de algunos medicamentos que se emplean en casos de sida debe tomarse la medicina en ayunas.
Las proteínas interfieren la absorción de L-DOPA para el tratamiento de Parkinson, por eso se recomienda eliminar en las primeras horas del día, inclusive en el almuerzo, el consumo de proteínas como carnes, huevos, leche, frijoles y otros.
Los betabloqueantes (atenolol, metoprolol,) y casi todas las estatinas (atorvastatina, fluvastatina, simvastatina) actúan mejor si se toman en ayunas, excepto lovastatina, que se debe tomar con comidas para aumentar su eficacia.
La toronja puede volverse tóxica para personas que toman fármacos anti rechazo por trasplante de órganos, o por el uso de algunos medicamentos para hipertensión.
Algunos anticonvulsivos como fenobarbital, inhiben la absorción de vitamina C, se aconseja mayor consumo de alimentos que la contienen, como frutas cítricas o tomate, separados de la hora que toma la medicina.
Respetar el horario indicado por el médico para la toma del medicamento es crucial, especialmente para diabéticos, la insulina y las pastillas para controlar el azúcar en la sangre tienen un inicio de acción y un tiempo de duración que se debe relacionar con el horario de alimentación.
No olvide preguntar a su médico sobre la interacción del medicamento que le prescribe y los alimentos, incluyendo agua y bebidas alcohólicas. Lea el prospecto y siga las indicaciones al pie de la letra.
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