A juicio del director del Centro Jurídico Social Ayuda al Consumidor, Juan Carlos López, los usuarios del transporte público del país no manejan la información necesaria de qué hacer cuando sus derechos son violentados ni un mecanismo de fácil denuncia.
“El usuario tiene poca información de establecer mecanismos de reclamo y de confiabilidad, en muchos casos pueden ser efectivos, depende del seguimiento que se le pueda dar, pero igual se tiene que dejar por sentado de forma permanente”, señaló López, quien constantemente recibe denuncias de abuso por parte de los transportistas.
En el caso del transporte intermunicipal, los pasajeros pueden hacer su queja formal vía telefónica al ente regulador, en este caso el Ministerio de Transporte e Infraestructura (MTI); no obstante, para López es necesario que en cada terminal de buses se coloquen buzones de quejas y sugerencias, para facilitar el ejercicio.
“Nuestra organización está segura de que si la gente reclamase diario, si se preocupara en para hacer un escrito solicitando al MTI de que existan buzones en las terminales de buses para quejar o recomendaciones, o un rótulo que diga: cualquier anomalía llame a este número, te aseguro que la gente tendría una mayor motivación para reclamar”, aseguró López.
Agregó que si se logra, de forma inmediata los dueños de unidades se preocuparían en mejorar el servicio para evitar problemas con el ente regulador.
Ausencia de consumidor a la hora de tocar temas delicados
Un aspecto desfavorable para los usuarios del transporte es que no tienen representación en la Mesa Técnica y por eso cuando se negocian cambios en el sector, como aumento del pasaje o proyectos de modernización, no hay una voz que hable por ellos.