La carencia de votantes en el Centro de Votación (CV) ubicado en el Colegio Luxemburgo, en la Colonia 10 de Junio, en el Distrito Cuatro de Managua, obligó a los sandinistas a andar de casa en casa buscando votantes, como confirmó una familia a LA PRENSA.
En la casa de María Lacayo solo ella salió a votar, mostrando con entusiasmo a LA PRENSA su dedo manchado de tinta y su orgullo de haber votado en la casilla 2, del partido gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN). Sin embargo, ni Lacayo ni la sandinista que andaba de casa en casa, lograron convencer a los otros ocho adultos de esa casa para ir a votar en el CV ubicado al frente.
“Es incoherente ir a votar porque ya sé que sabe el partido que va a ganar, no voy a perder mi tiempo. Las elecciones tienen que ser justas no así…”, dijo Valeria Morales, de 19 años, nieta de Lacayo.
La abuela Lacayo dijo que ella no puede obligar a sus hijos y nietos para que vayan a votar. Ante la negativa de la familia Lacayo, la CPC, como se le conoce a los sandinistas en lo barrios agrupados en los autodenominados Consejos del Poder Ciudadano, se mostró molesta.
Jonathan Lacayo, de 21 años, también dijo que no iba a votar al igual que lo confirmaron los otros seis adultos de la casa. La mamá de Valeria también dijo que no votaría.
En el Colegio Luxemburgo se notó la coordinación entre los miembros del Consejo Supremo Electoral (CSE) y los militantes sandinistas, quienes disponían de vehículos particulares sin placas y rentados (según la calcomanía que mostraba el lugar de renta) para trasladar a los ciudadanos al CV y luego los iban a dejar. Este CV instaló 8 Juntas Receptoras de Votos (JRV).
El traslado de votantes también se observó en el Centro de Votación de la Escuela Parroquial Sagrado Corazón de Jesús, ubicada en el barrio María Auxiliadora.
Hasta sillas de ruedas
A dos fiscales que querían unirse a una Junta Receptora de Votos del Colegio Tenderí se les negó el acceso porque una llegó después que se constituyó la misma y la otra porque no portaba cédula de identificación, según explicó Daniel Espinoza, coordinador del Centro de Votación.
“Hemos tratado de apegarnos a la Ley Electoral y, la ley es clara, precisa y concisa. Y dice que la hora de constitución de todas las Juntas Receptoras de Votos es a las 6:00 a.m. (…) Después vino otra muchacha que quería constituirse sin cédula y la ley es clara”, aseveró Espinoza.
Asimismo, afirmó que este año no se ha visto la masificación de votantes como en elecciones anteriores pero que aún así han llegado ciudadanos. Para ello, en ese CV se dispuso de sillas de ruedas para transportar a las personas de la tercera edad que querían ir a votar.
Los llevaron a votar
En camionetas y carros particulares grupos denominados “movilizadores” del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) se encargaron de trasladar desde los barrios hasta los Centros de Votación (CV) a sus militantes, ancianos y discapacitados, una acción violatoria a la Ley Electoral (Ley 331).
En los CV ubicados en los colegios Benjamín Zeledón, en el barrio El Recreo, Distrito 3, hubo poca afluencia, pero fue donde más se trasladó votantes con este mecanismo. La modalidad se repitió en el Colegio María Inmaculada, en el Centro de Salud del barrio Altagracia, y en el Colegio República de Luxemburgo, en el barrio La Esperanza.
“Son grupos movilizadores sandinistas que se encargan de traer a la gente que no puede moverse, que tiene algún impedimento físico”, confirmó Heylin Orozco, coordinadora suplente del CV en el Colegio Benjamín Zeledón.
Los Centros de Votación de los colegios Divino Pastor, Benjamín Zeledón, María Inmaculada, Colegio Nicaragüense Francés, en el Fernando Gordillo y la Universidad de Managua abrieron las juntas después de las 7:20 debido a la ausencia de la mayoría de fiscales de los partidos opositores al FSLN.
En un recorrido por centros de San Judas, Colonia Independencia y Bolonia, LA PRENSA constató que el número de votantes se redujo por la tarde. JRV vacías, fiscales electorales conversando afuera de las Juntas, observadores electorales tomando siestas en los pupitres de los colegios y policías electorales sentados en las afueras a la espera de que llegara algún votante.
De cinco CV visitados en San Judas, solo en el Colegio Rodolfo Rodríguez Los Quinchos se formaron dos filas de cinco personas en dos JRV. En menos de media hora la fila se había disipado.
Ahí mismo Mirtala Vallecillo Cuarezma hizo su tercer intento de votación. “No he podido votar porque no aparezco en ninguna lista, me dicen que me busque en los centros cercanos, ¿cómo es que invitan al voto y lo borran a uno de la lista?”, reclamó Vallecillo quien al final de la jornada electoral había recorrido siete centros de votación, en Loma
Linda, San Judas y Camilo Ortega y en ninguno estaba inscrita.
Encontró incluso nombres de vecinos ya fallecidos, pero el de ella no. Cansada de recorrer CV, Vallecillo regresó a su casa sin votar.