El neuromarketing, es la aplicación de ciencias que estudian el funcionamiento del cerebro para mejorar las ventas.
El cerebro tiene tres componentes: racional, emocional e instintivo (reptiliano). El principio básico del neuromarketing es que a la hora de decidir qué comprar, la emoción le gana a la razón y el instinto/reptil le gana a los otros 2 (emoción y razón).
La mayoría de las decisiones de compra es subconsciente. Se disparan frente a estímulos/símbolos que significan algo relevante para el subconsciente. Amamos lo simple/fácil y odiamos salir de nuestra zona de confort. En esencia, toda compra tiene relación con algún nivel de miedo oculto en nuestro cerebro.
Placer, seguridad, trascendencia y deseo de poder, son poderosos motivadores que obligan analizar lo que el cerebro quiere. Aprender a leer entre líneas, interpretar gestos, proyectar, preguntar y contra preguntar hasta encontrar los disparadores de miedo, placer o seguridad que motivan al comprador.
El buen marketing es en esencia de personas y no de clientes. Buenos vendedores le venden a la mente al entender que funcionamos por motivación y logran “vender sin vender”, reduciendo el miedo, ahorrando energía o aumentando el placer del comprador.
La emoción lo es todo. El mejor marketing es aquel que es capaz de despertar emociones positivas que disparan la compra al generar recordación/motivación de necesidades de compra de determinado producto.
Todo entra por los ojos/mente, nos encanta tocar para sentir. Historias, imágenes y metáforas relacionadas con emociones antiguas guardadas en la memoria profunda, ayudan a despertar la motivación de compra.
El género diferencia las preferencias del comprador:
· Los hombres funcionamos con “visión unilateral dirigida”, evitamos entrar en mucho detalle y el producto nos entra más por la vista.
· Las mujeres funcionan más con base a “visión panorámica”, gustan de ver muchos detalles relacionados al producto y se afectan más que los hombres, por el olfato y el oído.
Día a día somos bombardeados por el neuromarketing sin darnos cuenta:
· Carritos grandes del supermercado nos impulsan a comprar más.
· Precios con terminaciones de 0.99 centavos de dólar, nos dan la impresión de ser más baratos.
· Iluminación, música, ubicación de productos/precios a la altura de los ojos, son varios de los elementos cuidadosamente diseñados para emocionarnos y motivarnos a comprar más.
El neuromarketing puede ayudarle a conectar con su consumidor, motivarlo a que compre su mensaje, ganarlo como cliente, conservarlo, hacer que vuelva y que recomiende su marca/productos.
(*)[email protected] – Aprende más en: www.123libertadfinanciera.com