El proyecto del Presupuesto General de la República (PGR) de 2017 contempla 103 millones de córdobas para el Ministerio de la Juventud, una cantidad cuatro veces superior a la del 2014, cuando se le asignaron unos 25 millones de córdobas.
En 2015, este Ministerio recibió 57 millones de córdobas, y para el 2016 tuvo el aumento más significativo, pues recibió 97 millones de córdobas, 40 millones más que el año anterior.
El exdiputado liberal Eliseo Núñez considera que este inusitado crecimiento presupuestario se debe a la actividad electoral de esos años porque el gobierno necesita “duplicar el presupuesto para pagar sus activistas en las elecciones”.
Desde el 2013, año en que fue creado, hasta el 2016, el Ministerio ha recibido más de 179 millones de córdobas, sin embargo, en su página web no dan detalles sobre los proyectos ejecutados con este dinero.
El exdiputado liberal Eliseo Núñez considera que el Ministerio debería generar políticas públicas como programas de becas, de inserción laboral o financiamientos deportivos, para “ocupar toda esta fuerza y todo este recurso humano enorme que se tiene y volcarlo hacia el desarrollo del país”, explica.
Sin embargo, según lo reflejado en su página web, el Minjuve limita la participación juvenil en talleres de capacitación, en la ejecución de programas de promotoría solidaria y en la organización de tardes recreativas para las comunidades del país.
La página web del Ministerio asegura que otorga becas nacionales e internacionales a los jóvenes, sin embargo, no hay información al respecto, ya que los enlaces están en blanco.
JUVENTUD POLITIZADA
Según Núñez, el Ministerio dirigido por el excoordinador de la Juventud Sandinista, Bosco Castillo, fue creado para “conseguir presupuesto para sostener el aparato organizativo de la Juventud Sandinista”.
“Yo creo que es el financiador directo de la Juventud Sandinista. Básicamente lo que hace es mantener el aparato partidario. La primera dama ha estructurado todo su poder basado en una cantidad de jóvenes organizados que tiene alrededor de un sistema paraestatal, híbrido entre el partido y el Estado”, dice el exdiputado.