En el boxeo cada año es como dos. Es un deporte en el que probablemente el paso del tiempo se siente más que en otros. Si esto es así, el olímpico Osmar Bravo ha burlado la teoría para confirmar que él es como el roble que se hace viejo para dar su mejor madera.
Bravo dio un paso al frente en el Campeonato de Campeones de la III Copa Alexis, celebrado el fin de semana en Jinotega, hasta donde viajó para derrotar al rivense Alberto Vargas para alcanzar su tercer gran campeonato en igual cantidad de certámenes y su victoria 31 al hilo, compitiendo en la división de los 81 kilogramos.
Si Bravo fue la figura en los combates de hombres, Jennyfer Castillo lo fue en los de mujeres, al imponerse a la chinandegana Kimberling Saavedra, quien tenía el impresionante registro de diez victorias seguidas en 48 kilogramos.
Otros como Mario Martínez (60) y Rommel Soza (56), lograron rectificar su pasado de derrotas en eventos anteriores, al vencer a Nelson Díaz y a Giovanny Gutiérrez, respectivamente.
El mundialista Darwin Martínez (52) demostró que pertenece a la élite, noqueando a Jario González en apenas un round. Por su parte, Nilton Olivas (49), David Mercado (69), Léster Espino (75), Jeffrey González (91) y Harris Vargas (+91) se consagraron los campeones en sus divisiones.
A la par de Jennyfer Castillo, Claudia Parrales (51), Maykelin Cruz (54), Elki Chacón (57) y Edelma Picado (60), se autoproclamaron las reinas de este año dentro de los cuadriláteros.