Venido de Chiapas, México, Aramis Solís es más que un boxeador. En medio del resumen de lo que puede ser su vida, es un hombre que lucha, que pelea por el pan, muy contento de salir por primera vez de su país, con la esperanza bajo el brazo de que esta noche la vida le haga un guiño, solo si vence al nica Ramiro Blanco, quien debió exprimirse este viernes para dar el peso luego de dos intentos.
Las palabras de Aramis son de agradecimiento. Ser la figura estelar de la cartelera que montará hoy la promotora Búfalo Boxing en el Puerto Salvador Allende en Managua, lo ha llevado a pensar en que este lugar es como el Madison Square Garden de Nueva York y que él es la súper estrella.
Su forma física es la de un fideo. Sin problemas pesó 121.8 libras ayer, mientras que Blanco debió trabajar extra y en la segunda oportunidad dio 122.8 libras, un tonelaje dentro de las consideraciones, pues el combate está pactado de 122 a 123.
“Mi mayor ilusión es llevarme esta victoria a México. Me parece que Ramiro tiene bien trabajado su cuerpo. Ya veré qué tipo de pelea me convendrá hacer, yo soy un estilista y esperaré cerrar la noche con la bendición de ganar”, apuntó.
En respaldo, Alexander Espinoza se medirá a Bryan Pérez en 118 libras. “Me verán un poco diferente, he trabajado en mejorar mi defensa, mi técnica y mi velocidad. Estoy listo para conservar mi invicto, pero sé que Bryan Pérez es un buen peleador, de dura pegada, pero confío en mi preparación para salir triunfante”, declaró Espinoza.
