Daniel Ortega, presidente inconstitucional de Nicaragua, escuchó, pero no se pronunció sobre la posición de tres mandatarios centroamericanos que se expresaron a favor de los derechos humanos de los migrantes.
Los presidentes Salvador Sanchez Cerén, de El Salvador, y el de Guatemala, Jimmy Morales, pidieron que se garanticen los derechos humanos de quienes migran por igual en los países de destino como en los que sirven de tránsito.
Estas declaraciones se produjeron durante el cierre de la XLVIII Cumbre de Jefes de Estado del Sistema de Integración Centroamericana (SICA), en Managua, este 20 de diciembre.
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Sánchez Cerén consideró que se trata de un desafío para la región y como tal debe responderse de manera conjunta.
“Para nosotros es de suma importancia que reiteremos nuestro compromiso común de garantizar la protección y el respeto a los derechos de nuestros migrantes, tanto en los lugares de tránsito como de los países de destinos”, dijo el presidente salvadoreño.
Nicaragua mantiene desde noviembre de 2015 el cierre de su frontera a miles de migrantes, que durante meses se quedaron varados en Costa Rica, cuando se dirigían a Estados Unidos .
Sánchez Cerén recordó “el llamado de atención” a los gobiernos del mundo por el papa Francisco, de cara a la Jornada Mundial de Inmigrantes y Refugiados prevista para 2017, en que sobretodo a los niños y niñas migrantes se les debe asegurar “la protección, la integración y soluciones estables”.
“Nos invitó a actuar ante los traficantes de personas que victimizan a nuestras niñas y niños. (Por ello) es necesario impulsar procedimientos nacionales y planes de cooperación entre los países de origen y de destino que eliminen la causa de la migración irregular”, dijo Sánchez Cerén.
Los gobiernos de los países miembros del triángulo norte, como se conoce a El Salvador, Honduras y Guatemala, cerraron filas en torno al denominan Plan de Alianza par ala prosperidad, que tiene entre sus metas combatir el crimen organizado y el tráfico de personas.
Sánchez Cerén dijo que esta iniciativa debería extenderse al resto de la región.
La secretaria de Estado por ley del Ministerio de Relaciones Exteriores de Honduras, María Dolores Agüero, quien representó a su gobierno en la Cumbre del SICA, explicó que decidieron desarrollar acciones conjuntas para eliminar la génesis de la migración irregular.
“Esto teniendo como presente que la migración como derecho humano sea una opción y no una necesidad”, coincidió Agüero.
“Migrar no es un delito”
El presidente Morales, de Guatemala, enfatizó que al aumento de la migración demanda de los Estados un mayor trabajo coordinado a nivel nacional e internacional para garantizar la protección para las personas que deciden salir de sus países de origen.
“Creemos que la migración es un derecho. Migrar no es un delito, por ello la realidad migratoria debe abordarse desde una perspectiva integral, basada en un enfoque de derechos humanos, atendiendo de manera diferenciada a los grupos más vulnerables entre ellos las niñas, niños y adolescentes, las personas con capacidades diferentes y las mujeres. Y esto lo podemos decir y lo debemos vivir independientemente de la situación migratoria de cada persona”, reclamó Morales.
Ortega al final solo habló de la necesidad de dar “un salto” en la integración y en las reformas al Sistema.
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Hablan de reformas
A la XLVIII Cumbre del SICA en Managua, estuvieron además del anfitrión Daniel Ortega, los mandatarios de Guatemala, Jimmy Morales; Salvador Sánchez Cerén de El Salvador y Danilo Medina de República Dominicana. Por Panamá asistió la vicepresidenta y canciller Isabel de Saint Malo; por Belice el embajador en Honduras, Alexis Rosado y por Costa Rica el vicepresidente y ministro de Hacienda, Helio Fallas. Todos se comprometieron a concretar reformas profundas para que el SICA logre una integración real, en beneficio de los centroamericanos.
En manos de Costa Rica
El gobierno de Costa Rica asumió este miércoles la presidencia por tempore del SICA, en ausencia del presidente Luis Guillermo Solís, quien no asistió a la Cumbre en Managua.
Pero Solís insistió este martes, en conferencia en San José, en que su ausencia a la Cumbre fue por el trabajo diario que le demanda coordinar las atenciones y reconstrucción de las zonas afectadas por el reciente paso del huracán Otto en ese país.
Solís recordó que él había adelantado desde hacía tres meses que no tenía viaje previsto para este fin de año y que esta reunión del SICA se cambió de fecha en tres ocasiones, lo cual dificultó coordinar agenda. Negó que su ausencia sea por los roces bilaterales con Nicaragua.
(Josué Bravo)
