El público está atento a los deportes no solo para saber quién gana y quién pierde, sino para inspirarse. Y el 2016 ofreció muchos momentos inspiradores, desde la solidaridad entre dos desconocidas en la pista de atletismo de RÃo de Janeiro hasta la fascinación de un niño por conocer a Lionel Messi, pasando por el gesto admirable del Atlético Nacional, en el momento en que la tragedia devastó a un club que iba a ser su rival.
Son pasajes y sentimientos que perdurarán en la memoria, más que el resultado de un partido o competición.
Hay otro ejemplo: este mes, cuando el reportero Craig Sager falleció debido a la leucemia, surgieron desde luego sentidos homenajes con tintes de tristeza. Pero abundaron también los recuerdos del mensaje positivo que el periodista transmitió cuando siguió cubriendo a nivel de cancha los partidos de la NBA y el basquetbol colegial pese a su enfermedad.
“¡Hombre, la vida es demasiado bella y maravillosa!â€, dijo Sager en agosto. “No eres solo tú, es tu familia, tus hijos, todo eso. La lucha. Luchar hasta el final con todas las fuerzasâ€.
A continuación, algunos momentos inspiradores durante el año:
Solidaridad ante la tragedia
Ilusionados, los jugadores del Chapecoense viajaban a MedellÃn en busca del primer tÃtulo internacional en la historia del modesto club del sur de Brasil.
El avión que los transportaba se vino abajo, dejando 71 muertos, incluidos 19 futbolistas.
En medio de la tragedia desgarradora, inspiró al mundo la reacción del Atlético Nacional, el club al que Chapecoense iba a enfrentar en la final de la Copa Sudamericana. En su estadio, el Atanasio Girardot, una multitud se reunió en la noche en que se hubiera disputado el partido de ida, para expresar sus condolencias. Y el equipo colombiano renunció a la posibilidad de hacerse del tÃtulo, pidiendo en cambio que este fuera entregado al rival brasileño en memoria de sus jugadores y dirigentes.
AsÃ, el club “Verdolaga†se privó de la posibilidad de ser el primero en la historia que conquistaba la Copa Libertadores y la Sudamericana en el mismo año. A cambio, Atlético Nacional demostró que hay otras formas de alcanzar la grandeza.
El 21 de diciembre, la Conmebol entregó formalmente el trofeo al enlutado Chapecoense.
Conocer a Messi
Primero, Murtaza Ahmadi, un niño afgano de 5 años, fue fotografiado cuando vestÃa una bolsa de polietileno con franjas albicelestes, improvisada como la camiseta que usa Messi con la selección argentina. El apellido y el número del astro estaban escritos con marcador negro en la parte dorsal.
La imagen se convirtió en una sensación en la internet. Luego, Murtaza pudo entrar a la cancha de la mano de Messi, antes de un partido amistoso del Barcelona. Cuando llegó el momento del saque inicial, Murtaza no querÃa separarse del argentino. El árbitro se lo llevó en brazos.
¡Sà se puede!
Ese cántico resonó en el estadio principal de tenis de RÃo, cuando la boricua Mónica Puig derrotó a la alemana Angelique Kerber, quien terminarÃa conquistando dos tÃtulos de Grand Slam para ascender al primer puesto del ranking.
Puig ganó la medalla olÃmpica de oro, un logro que ningún otro deportista de la isla habÃa alcanzado jamás. Y mientras el himno de Puerto Rico resonaba, Puig no pudo siquiera unirse a los espectadores que lo entonaban. “Si hubiera parado de llorar, probablemente habrÃa cantadoâ€, dijo.
Ayuda a una rival
Durante las eliminatorias de los 5,000 metros en los Juegos OlÃmpicos de RÃo, la estadounidense Abbey D’Agostino y la neozelandesa Nikki Hamblin tropezaron entre ellas y cayeron.
D’Agostino se levantó de inmediato y, en vez de reanudar la persecución de las punteras, se agachó, ayudó a que Hamblin se levantara, y le susurró al oÃdo: “Arriba, tenemos que terminar estoâ€.
Resulta que ambas estaban lesionadas. D’Agostino apenas podÃa moverse para el final de la carrera e incluso necesitó de una silla de ruedas para llegar a la enfermerÃa. Pero ambas cruzaron la meta y se abrazaron.
¿Eran amigas antes de los Juegos? No. ¡Esa chica encarna el espÃritu olÃmpico!, destacó Hamblin. “Nunca la habÃa visto antesâ€. Incluso los dirigentes olÃmpicos se mostraron conmovidos por el episodio y otorgaron a las dos atletas un lugar en la final.
La fiesta que demoró un siglo
El primer tÃtulo de los Cachorros de Chicago en la Serie Mundial en más de un siglo fue todo un suceso para muchos de sus fanáticos, hartos de sufrimientos.
A algunos, les dio la oportunidad de reconectarse espiritualmente con sus seres queridos que nunca atestiguaron una coronación del equipo.
Wayne Williams cumplió una promesa que él y su padre se hicieron mutuamente. Condujo desde Carolina del Norte hasta la tumba de su progenitor en Indiana, para “escuchar juntos†la radio durante el séptimo juego, en el que Chicago doblegó a los Indios de Cleveland.