A 4.5 kilómetros de la carretera principal que conduce al municipio El Crucero se encuentra la comunidad Santa Julia, cubierta por una densa vegetación, y solo comunicada por un camino de tierra, que durante los meses que más llueve se vuelve difícil transitarlo.
En esta comunidad usted encontrará el proyecto Apapachoa, una iniciativa ecocultural que está siendo impulsada por un grupo de jóvenes de diferentes perfiles profesionales; uno de ellos es Ernesto López.
Apapachoa, que según López en náhuatl significa abrazo del alma, tiene la proyección de convertirse en una fundación, a través de la cual puedan contribuir al desarrollo de la comunidad, bajo tres ejes centrales: ecoturismo, educación y agricultura orgánica.
López aseguró que Santa Julia presenta muchas de las condiciones ideales para este tipo de proyectos, ecoculturales, puesto que es una comunidad bien organizada y no ha habido un empuje cultural y educativo alternativo en la zona.
El enfoque del ecoturismo busca que los visitantes se puedan involucrar en las diferentes acciones que desarrollarán, como por ejemplo, apoyar en el huerto que están construyendo.
Mientras tanto, en la parte educativa, desde el mes de mayo se han impartido clases de capoeira, a las que asisten entre 12 a 15 niños.
El objetivo es que a través del centro cultural se impartan cursos de música, arte, canto. También invitan a artistas nacionales a participar con talleres abiertos.
Actividades culturales
Gabriel Quintero, profesor de capoeira explicó que los niños se muestran interesados no solo en aprender a bailar, sino que despierta su interés por aprender a tocar los instrumentos.
Impulsarán la agricultura orgánica por medio de talleres.
Instalaron los primeros neblinómetros como una alternativa ante la escasez de agua que sufre la comunidad. Esto contó con el apoyo de la organización FogQuest.