El caso de una niña de 13 años, que a la medianoche del 31 de diciembre habría escapado de un intento de abuso sexual en la comunidad de Santa Isabel, del municipio de Somoto, Madriz, ha generado indignación en la Red Local Contra la Violencia hacia las Mujeres al conocer que investigadores de la Policía estarían intentando que los padres de la víctima se sienten a mediar con el supuesto agresor.
La psicóloga de la Red Local Contra la Violencia hacia las Mujeres en Somoto, Yanira Balladares Salinas, expresó este jueves que los padres de la niña denunciaron ante ese organismo que dos oficiales de la Policía los citaron para la mañana de hoy para mediar con el presunto acosador de la menor, quien tiene 24 años.
El primero de enero de este año los padres de la niña denunciaron en la Policía que a la medianoche del 31 de diciembre supuestamente el muchacho interceptó en un camino de la comunidad de Santa Isabel a la menor e intentó raptarla, porque desde el día 24 de ese mismo mes le habría insinuado que se fuera a vivir con él.
En el intento de introducirla dentro de una propiedad rasgó el vestido de la niña, le causó laceraciones en la piel y le habría fracturado un brazo.
“Lo que nos indigna es que los mismos investigadores policiales están revictimizando a la niña, porque en vez de darle una debida atención han dicho a sus padres que el abusador no puede ser detenido ni procesado, sino que cabe una mediación”, dijo Balladares.
LA PRENSA intentó conocer la versión de las autoridades, pero se informó que no darían declaraciones.
El artículo 56, del Código Procesal Penal, establece que la mediación procederá en: las faltas, los delitos imprudentes o culposos, los delitos patrimoniales cometidos entre particulares sin mediar violencia o intimidación, y, los delitos sancionados con penas menos graves.
A mediar con presunto agresor
En Bluefields, una agente policial supuestamente habría planteado a Nataly Hebberth llegar a un acuerdo con el hombre que le propinó una paliza hace algunos días.
Hebberth tuvo una pelea en octubre con la madre del presunto agresor, pasó ocho días presa y luego hicieron un acuerdo entre ambas. Sin embargo este primero de enero, Delvin Marin la agredió aparentemente en venganza.
“Yo puse denuncia ese mismo día en la Policía por la agresión, no puedo permitir que un hombre me esté golpeando por problemas de mujeres, lo que más me indigna es que al día siguiente ese tipo fue dejado en libertad, pues dijeron que no había elementos para tenerlo detenido… me instaron a que yo no hiciera grandes las cosas y que llegara a un acuerdo con la familia de Delvin”, dijo.
LA PRENSA buscó la versión de Marin, pero este no quiso dar declaraciones. Vía telefónica se preguntó al jefe de la Policía, comisionado Cruz Alonso Sevilla, quien dijo: “No manejo esa información, nada del caso, pero tengo interés de reunirme con la víctima para profundizar sobre lo sucedido y darle una respuesta”.