14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.
Gustavo Porras

Gustavo Porras electo presidente de la Junta Directiva de la Asamblea Nacional .Nacional Diputados reciben credenciales de parte del presidente del CSE Roberto Rivas. Managua 9 de enero del 2017. Foto LAPRENSA/Manuel Esquivel

Gustavo Porras afianza su poder en Asamblea

Las primeras horas de la Asamblea antes de iniciar el periodo de la dinastía de los Ortega

Los meses de especulaciones fueron sepultados en la oscurana, con un sistema de sonido inútil por la falta de energía eléctrica y la tirria del calor en el hemiciclo. Sonriente el diputado sandinista Gustavo Porras Cortés fue flanqueado por colegas de su partido, minutos antes de que la votación casi unánime de aquellos lo convirtieran en el nuevo presidente de la Asamblea Nacional, y, con ello, se consolidó la línea dura de la primera dama Rosario Murillo en ese poder del Estado.

Con la elección de Porras desaparece la tesis esbozada en diciembre pasado de que el cargo sería ocupado por Omar Halleslevens, diputado de la Asamblea Nacional, y, a quienes los especialistas consideraban para ocupar el cargo como una cuota del Ejecutivo al poder militar que este hombre detentó mientras fue jefe del Ejército en el período 2005-2010, un año antes que se postulara como vicepresidente del caudillo sandinista en 2011, aquellos comicios en los que se reeligió con prohibición expresa de la Constitución y amparado en una sentencia judicial.

Porras dijo que trabajarían por la prosperidad y aseguró que la Asamblea bajo su gestión sería una “expresión viva y genuina del diálogo, alianza y consenso”. El primer acto público, posterior a la instalación de la legislatura para el período 2017-2022, ocurrirá con la entrega de la banda presidencial, símbolo del poder ejecutivo. En primera fila estará Murillo, la nueva vicepresidenta. Porras recibirá la banda, dado que Ortega termina su segundo período desde 2007 y se la entregará nuevamente para que detente un nuevo mandato, uno peculiar, porque su sucesora constitucional será su esposa, es decir, nuevamente el poder en Nicaragua lo ejerce oficialmente una familia. Eso no pasaba desde la caída de los Somoza en 1979, una gesta lograda con la sangre de miles de víctimas.

La cuota del poder

Porras es médico, tiene 62 años, bajo su puño se concentra el poder de los sindicatos y una importante cuota de diputados que alcanzaba los 18 en la lista oficial del FSLN. Sucede a René Núñez, fallecido en septiembre de 2016, a quien los sandinistas mantuvieron en su cargo como un homenaje a su desempeño, un caso inusitado que atrajo la atención a nivel internacional. La sesión inició a las 9:40 minutos de la mañana, duró tres horas, media hora de las cuales los funcionarios presos de sus trajes se sofocaron esperando la  energía eléctrica y con ello el aire acondicionado.

“Nosotros estamos seguros que dará continuidad al legado del compa (ñero) René”, dijo públicamente la diputada Iris Montenegro. Pero sus estilos eran distintos.

Mientras Núñez era considerado hasta para opositores como conciliador, la imagen de Porras es la del duro líder de las huelgas impuestas por los sindicatos mientras el FSLN estuvo en la oposición entre 1990 y 2007.
Colérico y de reacciones histriónicas frente a la prensa cuando se le cuestiona, Porras escenificó uno de sus momentos más incómodos el 25 de marzo de 2009, cuando reaccionó a una investigación de LA PRENSA que reveló el incremento de su patrimonio.

A la publicación de la compra de una finca en Matagalpa, cuyo costo se estimó en 148 mil dólares, Porras respondió: “¿Tenés problemas con eso…? Si fuera Chamorro, anduvieras feliz con eso. Como no soy Chamorro… (pierde la paciencia) Pero qué subordinado que sos vos, levantate, hermano. Liberá esa barrera de los Chamorro”, dijo en el reportaje “el sindicalista hacendado”.

Igual se quedó sin explicaciones a ver los contratos múltiples con el Estado que recibió una empresa de su asesora y vecina, Alicia Sáenz Marenco, un centro de llamadas que con el ascenso del sandinismo se convirtió en una distribuidora de medicinas.

Junto con Porras,  fueron nombrados Maritza Espinales, quien es parte de los sindicatos bajo su control como su primera vicepresidenta y la diputada sandinista Gladys Báez.

Cada uno de los nombramientos se hizo con la aprobación de la mayoría de todos los legisladores. Oposición fue una palabra sin significado.

Integrantes de directiva

En lo formal el FSLN solo dio dos cargos en la directiva a partidos con otras siglas que participaron en la contienda electoral, calificada por sectores independientes como una farsa, en las que Ortega se reeligió sin competencia.

El tercer secretario Alejandro Mejía Ferreti es de la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN) y la tercera vicepresidenta María Haydée Osuna, a nombre del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), del expresidente Arnoldo Alemán (1997-2001), asistió a la juramentación de los legisladores, entre ellos su esposa María Fernanda Flores, quien se declaró “millonaria de amor” por Nicaragua cuando los periodistas le preguntaron recientemente por su fortuna.

Jerez respaldó a Navarro

La primera secretaria de la Asamblea Nacional es la sandinista Raquel Dixon, quien reemplaza a la diputada saliente Alba Palacios. El segundo secretario es Wilfredo Navarro, exdiputado liberal del grupo de Alemán y ahora miembro del sandinismo. Las sorpresas que el día deparaba serían mayores.

La propuesta de nombrar a Navarro vino del diputado sandinista Douglas Alemán y fue respaldada por  Byron Jerez Solís, el exdirector general de Ingresos en el gobierno de Alemán, enjuiciado por corrupción en 2002 y absuelto años después, quien pidió el voto a todos los diputados para “su correligionario”. Las risas de los asistentes no se hicieron esperar, mientras él orondo prometió ante los periodistas que sería “independiente”.

Durante su participación, Jerez mantuvo expectante a la muchedumbre.

byron

 

Las razones de Alemán
El expresidente Arnoldo Alemán dijo que “tonto es el hombre que dice que manda en su casa”, cuando se le preguntó directamente por qué el PLC había promovido a la Junta Directiva de la Asamblea Nacional a Osuna y no a su candidato presidencial, Maximino Rodríguez, lo que intentó vender como una política de equidad de género. El caudillo liberal no quiso referirse a la acreditación como diputado de Byron Jerez, su exdirector de Ingresos investigado en su momento por corrupción, como él. “No tengo nada que comentar”, sostuvo.

 

 

 

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí