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torre de Babel, estudiantes, Nicaragua, protestas

El fallido museo de Tiscapa

Querida Nicaragua: En aquellos días esperanzadores en que el pueblo derrotó a la dictadura somocista y los comandantes ocuparon, al parecer provisionalmente el búnker de Somoza, mucho se hablaba de la histórica loma de Tiscapa.

Querida Nicaragua: En aquellos días esperanzadores en que el pueblo derrotó a la dictadura somocista y los comandantes ocuparon, al parecer provisionalmente el búnker de Somoza, mucho se hablaba de la histórica loma de Tiscapa, donde Moncada había construido la casa presidencial y donde Somoza vivió todos los años de la dictadura y sus hijos igualmente consideraban la loma de Tiscapa como su propia casa.

A muchos personajes de la revolución les oí repetir que la loma de Tiscapa sería convertida en museo y que el público podría ver los calabozos, las ergástulas miserables donde Somoza mantenía a los presos políticos, la jaula de los leones, las celdas aquellas que ocuparon los Báez Bone, Pedro Joaquín Chamorro, el doctor Enrique Lacayo Farfán, Rito Jiménez Prado, y tantos y tantos opositores que me es difícil recordar pero que en cuarenta y cinco años de dictadura suman varios centenares de ciudadanos torturados y muertos. En realidad es una muy buena idea convertir la loma de Tiscapa en un museo que exhibiera la barbarie de la dictadura derrotada y mucho se habló de esto con entusiasmo, y yo escuchaba complacido porque me parecía una reliquia histórica, cruel, pero reliquia histórica al fin.

Al parecer la idea se fue diluyendo y las cárceles de Tiscapa siguieron siendo cárceles con el nombre cambiado. Comenzaron a llamarse cárceles del Chipote, tal como se han seguido llamando.

Lo que sí se hizo fue un bonito parque en lo alto de la loma desde donde se divisa todo el panorama de Managua en una vista muy hermosa. Luego el poeta y sacerdote Ernesto Cardenal diseñó un enorme perfil del general Sandino, que está colocado en lo más alto de la loma y que es visible desde casi cualquier lugar de Managua. Pero las cárceles siguieron siendo cárceles, los calabozos, el mal trato a los prisioneros no cambió para nada, la pestilencia de las celdas, la oscuridad y el terror que debe sentirse ahí siguieron igual. Resulta contrastante que en la misma loma tan linda, en un mirador tan hermoso donde uno se recrea el espíritu mirando la inmensidad y belleza de una puesta de sol, se encuentre a unos cuantos pasos hacia abajo el sufrimiento, el dolor, la injusticia, la crueldad, la tortura y algunas veces hasta la muerte. Todo en el mismo sitio.

Otro doloroso contraste: en un programa televisivo que tiene los días martes a mediodía la Policía Nacional pondera el buen comportamiento de la misma, la disciplina, el contacto permanente con el pueblo, la protección de la seguridad ciudadana, olvidándose de todo aquello que permanece en el olvido más cruel como el asalto a los muchachos que defendían las pensiones de los viejitos en el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) y el robo de sus vehículos; olvidando el triple asesinato de El Carrizo en el departamento de Madriz, la mochila bomba de Pantasma, las palizas a los campesinos  en El Tule, la demolición del hotel de Milton Arcia en la Isla de Ometepe, las mordidas diarias de los policías a los pobres motociclistas y conductores de vehículos, las multas exageradas, etcétera.

Todo eso no cuenta en los informes policiales ni al parecer se hace algo para remediar esos males. Todo lo contrario, siempre callan o dicen que lo están investigando. Hubo en 2015 en las cárceles del Chipote un dolorosísimo suceso, el del joven Francisco Javier Ponce, que apareció supuestamente ahorcado en la celda de la Policía. No hubo explicación pero declaran que están investigando. Mientras tanto algunos organismos internacionales califican en forma sobresaliente a la Policía Nacional. La idea del museo en que se iba a convertir la loma de Tiscapa se perdió en el olvido. No habrá tal museo, seguirá siendo una horrenda cárcel de tortura. En todo caso a la loma de Tiscapa puede llamársele con más acierto como el museo de la muerte.

El autor es gerente de Radio Corporación y excandidato a la Presidencia de la República en 2011.

Columna del día Managua museo de Tiscapa archivo

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COMENTARIOS

  1. juvanal mairena
    Hace 7 años

    Que buena Radiografia Don Fabio, gracias por recordar a los Nicaraguenses las tierras movedizas en que nos encontramos.

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