La Murocracia está de moda. Me parece que estoy en mis años de niño, leyendo al Tío Rico Mc Pato y este, haciendo obras monumentales, al mejor estilo de China y su muro que sigue el movimiento de la naturaleza, imponente, con un diseño que varios siglos después se enseña ahora como un activo turístico. Rico Mc Pato era el clásico gringo multimillonario que a través de sus millones de dólares, tenía pozos petroleros, hoteles, enormes edificios que eran la envidia y sorpresa de muchos, sobre todo la admiración de sus sobrinos Hugo, Paco y Luis, y el graznido incesante del Pato Donald. Ese graznido, también de Rico Mc Pato, el viejo vulgar, que humillaba a los demás y que más de una vez rifó un hotel enorme, él se quedó con dos acciones y solo una era necesaria para volver a sacarse el inmueble. No pagaba impuestos ni hacía declaraciones de bienes y ganancias, nadie lo obligaba, pues supuestamente siempre tenía pérdidas. Construyó y desarrolló una gran área de juegos… casinos, hoteles, ruletas y todo lo quería, gratis. No le interesaba cumplir con los constructores, para eso tenía abogados eficientes con los que siempre salía ganando.
El presidente Trump arrancó su campaña en forma negativa, insultando a los mexicanos, afroamericanos, amenazando con un muro, trató a mucha gente despectivamente, incluyendo medios de difusión, quienes precisamente le empezaron a hacer gratis la bulla. Eso era lo que quería Mc Pato y lo logró en grande. Ganó porque la Hillary tenía mucha cola —al igual que su oponente. El más frío y calculador, nunca pensó en ganar por mayoría simple— si no por los votos electorales. Siguió tronando, gritando, graznando y lo primero para consagrase eternamente y quedar bien con su ego, Mc Pato anunció la construcción del muro que deberá ser pagado por sus vecinos del sur. Los reyes Babilónicos, Los emperadores romanos y los dinastas egipcios, son el modelo que desea alcanzar para situarse en la historia —no de USA— sino del mundo entero.
El Murócrata Rico Mc Pato asustó a mucha gente —ese es su estilo— y lo goza, su ego es infinito, sin embargo, partiendo de lo absurdo, México puede demandar sus derechos sobre California, Texas, Nuevo México y Arizona, daños y perjuicios y tantas otras cosas… ¿qué haría Rico Mc Pato?, movería la cola, graznaría hasta ponerse colorado púrpura e inventaría un nuevo muro con Canadá, quienes históricamente tomaron e incendiaron Washington.
En este momento varias empresas ya están calculando sus posibilidades de construir el muro… ¿pero quién va a pagar?… los mexicanos que envían sus remesas… los impuestos a las mercancías que llegan de México y que en su mayoría son de capital norteamericano… los carteles de drogas, el Chapo Guzmán… El iluso tío Rico no ha escuchado a los vecinos de la zona del muro, ellos dicen aquí pueden poner todos los muros que quieran pero los inmigrantes y la droga seguirán pasando.
Como sana aportación, creo que los fabricantes de armas, que las venden a los padrinos y sus compadres… que las mandan de contrabando a México y sirven para asesinar a inocentes y dejan billones de dólares a la industria norteamericana de armas, son quienes deben reforzar la industria de la construcción por medio del muro, si es que el plan de Mc Pato es abrir fuentes de empleo. En fin esto va para largo, mientras China puede ser el gran sustituto de Estados Unidos o Rusia puede despertar y participar en el gran mercado que tontamente está abandonando los Mc Patos con su Murocracia.