La juez Indiana Gallardo admitió acusación y dictó prisión preventiva para Víctor Manuel Morales Blanco, de 30 años, y Paúl Emerson Jaen Leal, de 29 años, por el asesinato de dos policías el pasado jueves en un tiroteo entre delincuentes y oficiales en el barrio San Luis en Managua.
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Jaen y Morales fueron presentados ante el juez este sábado y acusados de asesinato en perjuicio de los policías Julio César Narváez y Howard Urbina Flores, robo agravado en grado de tentativa, portación ilegal de armas de fuego y obstrucción de funciones en perjuicio de la Policía Nacional. También ha sido acusado por intento de asesinato frustrado en perjuicio del oficial Oliver Manuel Chow Alvarado, quien se encuentra hospitalizado. La audiencia inicial ha sido programada para el próximo 9 de febrero.
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Los hechos ocurrieron la mañana de este jueves en el barrio San Luis de Managua. Según la acusación de la Fiscalía, los acusados, quienes pertenecían a una banda delictiva, ya tenían días de andar rondando por el lugar y la patrulla policial llegó después de atender una llamada ciudadana que les informó que unos hombres andaban en actitud sospechosa. Cuando los oficiales llegaron al lugar, los tres delincuentes se dieron a la fuga y las autoridades les dieron persecución. Al alcanzarlos, les interceptaron el paso y al decirles que bajaran del vehículo, uno de los delincuentes, Diógenes Trinidad Medina Martínez, quien conducía el carro y que murió luego, abrió fuego contra los policías. Cuando otro de los oficiales acudió a ayudar a su compañero, el acusado Víctor Morales sacó el arma y le disparó al policía.
En la balacera entre delincuentes y policías, fallecieron el subinspector Julio César Narváez Valle, de 35 años, y el suboficial mayor Howard Antonio Urbina Flores, de 33 años. También murió uno de los delincuentes, Diógenes Trinidad Medina Martínez, quien perteneció a la Policía Nacional y fue dado de baja deshonrosa en 2004.
Defensa pide valoración médica
Roberto Cruz, defensa de Víctor Morales ha pedido una valoración médica para su cliente porque, según él, los golpes son evidentes y su defendido tiene las costillas rotas. Álvaro García defensa de Paul Jaen, dijo que su representado ha sido víctima de tortura y pidió que sea remitido a Medicina Legal. Además solicitó que se le garantice su seguridad física y psicológica.
“Me dijeron que si no decía lo que ellos querían me iban a seguir golpeando hasta matarme”, dijo el acusado Víctor Morales. La juez accedió a que ambos acusados fuesen remitidos al Instituto de Medicina Legal para que su estado de salud sea valorado.
