Si es agua para tomar, los pobladores de la comarca Malacatoya deben ir a los recipientes de plástico que mantienen tapados porque la que llega por el grifo está contaminada y solo les sirve para lavar.
En esa situación llevan más de un año y por eso claman porque las autoridades de la Empresa Nicaragüense de Acueductos y Alcantarillados (Enacal) le pongan punto final al problema de agua para consumo humano.
“El problema de agua ha venido de la contaminación de los pozos y el agua la dan día de por medio con pipas. La comunidad está pidiendo el apoyo de Enacal porque el cobro del agua (contaminada) está puntual”, dijo Idaris Chavarría, pobladora de Malacatoya, quien paga cerca de 120 córdobas mensual por el servicio de agua domiciliar.
Son dos cisternas con capacidad para 2,500 galones cada una, que llevan agua limpia a las familias de Malacatoya, esta sí es de forma gratuita. Los pobladores solo tienen que sacar sus recipientes desde temprano y permanecer vigilantes a la hora que pasa la cisterna, que se abastecen del hidrante ubicado cerca del Instituto Tecnológico Nacional (Intecna), en Granada.
“Siempre dicen que van a limpiar el pozo contaminado, que van a construir otro y solo en palabras quedan las promesas de la gente de Enacal”, acusó Francisca López, quien raciona el consumo de agua en la familia para que alcance para todos.
Afectación al orinar
Los habitantes de la comarca Malacatoya en otras ocasiones han asegurado que han habido casos de que personas que trabajan la tierra han orinado sangre por la falta de agua y las altas temperaturas.
Los afectados piden a la Empresa Nicaragüense de Acueductos y Alcantarillados (Enacal) que sea una prioridad que vuelvan a recibir agua potable en los grifos de sus casas.