A pesar de que no existe una propuesta formal para que la empresa Uber brinde el servicio de taxis, el Gobierno, a través del asesor presidencial en Asuntos Sociales, Orlando Núñez Soto, aseguró que la empresa extranjera no tiene las “puertas abiertas” en Nicaragua.
Núñez sostuvo que el gremio de transportistas había expresado su preocupación ante la entrada de Uber, la cual fue planteada por el Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep) el pasado 17 de enero en la reunión semanal que realizan los empresarios.
“Ellos nos plantearon que no dejarían entrar a esta empresa y nosotros escuchamos y no queremos que haya un conflicto”, expresó Núñez en declaraciones a LA PRENSA.
El presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), José Adán Aguerri, cuando fue consultado sobre este tema dijo que es importante que empresas como Uber “vuelvan a ver a Nicaragua”, pero que la visita de sus representantes no significa que hayan decidido establecerse en el país.
LA PRENSA intentó comunicarse ayer con Aguerri para saber qué opinaba ante la decisión del Gobierno, se le llamó en reiteradas ocasiones y se le envió mensajes por WhatsApp, pero tampoco respondió.
Reynaldo Bermúdez, presidente de la Unión de Cooperativas de Taxi de Managua (Unicotaxma), dijo que el Gobierno no va a emitir un comunicado sobre el tema, pues la empresa no solicitó la entrada al país.
“Efectivamente Amaru Ramírez (director del Irtramma) nos ha llamado a todos los dirigentes del gremio para expresarnos la voluntad política de la Presidencia de la República, que establece que Uber no va a entrar en este país, lógicamente nosotros no vamos a emitir un comunicado conjunto de acuerdo firmado con el Gobierno, porque en esta situación se trabaja a ruego y no ha habido de parte de Uber una petición al Gobierno, entonces no se puede hacer un pronunciamiento, pero hay orientación a las autoridades que si llegan a solicitar permiso, que no den espacio”, dijo Bermúdez.
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No es sano restringir libre competencia
Por su parte, Juan Carlos López, coordinador del Centro Jurídico Social de Ayuda al Consumidor, manifestó que no es sano que no se permita una libre competencia y que los más perjudicados en este caso son los usuarios.
“Uber venía a ampliar el tema de competencia en el país, que beneficia a los usuarios, nosotros hemos sido anuentes que toda empresa debe entrar a Nicaragua con la legalidad que establece y que eso se traduzca en mejora a los usuarios como tal, lo que sí nos preocupa es que el Gobierno con esa decisión está privando a los usuarios de tener algún modelo de elección”, expresó López.
Intentos que han fallado
Al cerrar la entrada a Uber hay que recordar que los intentos de modernizar el sistema de transporte selectivo en Managua han fracasado, pues en 2012 el Irtramma anunció la implementación del uso del taxímetro, pero el proyecto piloto fracasó a inicios del 2013. El siguiente año se pensó en modernizar el servicio con la opción de pago electrónico, lo probaron unas veinte unidades, pero pocos lo usaron y no prosperó, posteriormente en el 2015, la empresa Efytaxi, de origen colombiano, que pretendía brindar el servicio usando una aplicación para ubicar taxis de manera segura, no alcanzó el éxito que esperaban.
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Piden baja al dominio de Uber
Omar Miranda, vicepresidente de la Federación Nicaragüense de Cooperativas de Taxis (Fenicootaxi), indicó que es necesario que se le dé de baja al dominio de Uber en Nicaragua, que fue creado con el fin de operar en el país.
“Evidentemente Uber en ningún lugar ha hecho trámite solicitando permiso, la plataforma de Uber ya aparece, aún no está operando pero cuando entrás a la página, ves ‘Uber Nicaragua’ y que están recaudando fotos, datos de la gente, conductores y dueños de vehículos, creemos que el presidente de la República debe expresar claramente que el dominio de Uber en la página web debe ser cancelado”, dijo Miranda.