Para el empresario radial y excandidato presidencial Fabio Gadea Mantilla, la Organización de Estados Americanos (OEA) no recogió las expectativas de los amplios sectores que apuestan por un cambio en el país que conlleve al rescate de la democracia.
“No podemos quedar inactivos y hay que ver qué pasa con la OEA para ver qué dice con el contenido del Memorándum de Entendimiento y esperamos (que Almagro) presente algo positivo”, expuso Gadea Mantilla, miembro del Grupo de los 27.
Gadea le recordó a Almagro que en Nicaragua no se puede fortalecer la institucionalidad porque la misma desapareció con el régimen de Daniel Ortega, presidente designado por el Consejo Supremo Electoral (CSE).
“(Que Almagro) no diga que hay que seguir fortaleciendo la institucionalidad porque aquí nadie está fortaleciendo la institucionalidad, hay que crearla porque está perdida, pero (Almagro) tiene miedo decirlo”, criticó el empresario radial.
Gadea insistió en que en el país no existen condiciones para fortalecer los mecanismos de la Carta Democracia, cuando el mismo gobierno que preside Ortega rompe con los principios de institucionalidad.
“Que van a tratar de favorecer los mecanismos para el cumplimiento de la Carta Democrática, si todos esos mecanismos están rotos porque no hay elecciones libres, porque no hay observación internacional; no hay padrón electoral. Eso es ridículo, porque además, no me explico por qué Almagro no tomó en cuenta los argumentos que presentaron los amplios sectores, sí parece haber tomado en cuenta lo que dijo el Cosep, el grupo de diputados que están allí, lo que le dijeron los partiditos zancudos”, cuestionó Gadea.
El acuerdo Gobierno-OEA
El Gobierno de Nicaragua y la OEA acordaron un plazo de tres años para fortalecer la democracia en un acuerdo común, sin tomar en cuenta a ningún sector político ni de la sociedad civil.
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El informe detalla que el próximo 28 de febrero la OEA y el Gobierno volverán a reunirse para firmar un Memorándum de Entendimiento que “incluirá aspectos técnicos” en aras de fortalecer la institucionalidad, en un período de tres años.
Los críticos del acuerdo cuestionan que este “es borrón y cuenta nueva” y que el Gobierno de Ortega busca legitimarse y ganar tiempo.
Ignora problemas reales
A juicio del experto en temas electorales José Antonio Peraza, el actuar de la OEA frente a la crisis institucional del país no ha sido la que se esperaba.
“Me parece que el acuerdo entre la OEA y el Gobierno es muy ambiguo. Allí ni se mencionan los fraudes electorales, ni la crisis institucional del país, tampoco se habla del diálogo”, señala Peraza.
“Otra cosa que yo veo grave es que es un acuerdo entre el Gobierno y la OEA, donde los sectores vivos de la oposición no van a tener voz, entonces el diálogo político que se necesita para avanzar y resolver la crisis institucional está muerto”, lamentó el especialista e investigador en temas electorales.