Pese a que hace casi un mes que una juez de ejecución y sentencia giró un oficio al Sistema Penitenciario Nacional para que conduzca al reo Manfredo Rivera, de 37 años, al Instituto de Medicina Legal para que le hagan una valoración oftalmológica, las autoridades solo le dicen “es verdad, allí está la orden”.
Ángela Voguel denunció en la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), su temor de que su hijo quede ciego.
El hijo de Voguel ya tenía alguna afectación en la vista pero, según la denunciante, las condiciones antihigiénicas que imperan en el penal pueden agravar su situación, sin que las autoridades hagan algo por evitarlo.
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Elieskar Vallecillo, abogada de la CPDH, señaló que en este caso hay una negligencia de la autoridad del penal con lo cual le violentan los derechos humanos al detenido. “Es cierto, él iba enfermo de su ojo, pero en las condiciones que está allí en el sistema ha perjudicado más su salud”, dijo Vallecillo.
“Mi preocupación es de que el ojo enfermo se le revienta en agua (…) allí está el epicrisis que el único que tiene bueno lo va a perder y va a quedar ciego mi hijo”, sostuvo Voguel quien se refiere a un dictamen de un oftalmólogo privado.
Rivera ingresó en diciembre del año pasado a la cárcel Modelo y en dos meses su cuadro ha agravado, esto según la denunciante por la condiciones en que guarda prisión.
Las inadecuadas condiciones higiénicas del penal, Voguel las resume con que a su hijo le tiene que llevar incluso algodones para que se cubra los oídos dado la gran cantidad de cucarachas en las celdas.
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