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Un grupo de mujeres denunció ante abogados del Cenidh los abusos de los que han sido víctimas en el SPN “La Modelo”. LA PRENSA//ROBERTO FONSECA

Familiares exigen verificar salud de reos en la Modelo

Las protestantes manifiestan que tienen información de que varios de los reos están golpeados, no tienen agua y no les han permitido ingresarles alimentos desde hace cuatro días.

La protesta de un grupo, en su mayoría mujeres, parientes de internos del Sistema Penitenciario Nacional “La Modelo”, de Tipitapa, fue reprimida este lunes con piedras, chorros de agua y gases lacrimógenos.

Ellas argumentaban que no les dan información sobre el estado de salud de los reos y que supuestamente funcionarios del Penal obligan a sus familiares a comprarles recargas telefónicas.

Aunque se ha afirmado públicamente que la disposición de las autoridades de suspenderles a los presos el acceso a la señal de teléfonos celulares, es para prevenir delitos desde las cárceles, ninguna autoridad penitenciaria brindó a los medios de comunicación independientes explicaciones del conflicto.

Lea además: Al Sistema Penitenciario ”le vale poco” la salud de un reo

Al mediodía de este lunes la protesta subió de tono cuando las autoridades del Penal las ignoraron en su demanda de que les permitieran verificar la condición de sus parientes.

Según dijeron, ver a sus parientes era una promesa de las autoridades penitenciarias.

Las mujeres empezaron a desesperarse por la falta de información oficial en relación a una serie de rumores procedentes del interior del Penal, de que la represión sufrida por los internos desde el pasado viernes ya había dejado al menos dos muertos y heridos.

Por la tarde, se llegó a conocer el nombre de uno de los reos que supuestamente había fallecido producto de la golpiza recibida. Nadie lo confirmó.

Temprano, frente al cordón de las Fuerzas Especiales de la Policía Nacional, las mujeres quemaron una llanta y detonaron morteros, mientras continuaron con sus demandas de conocer la situación de los convictos.

La angustia y zozobra aumentaron cuando las visitas programadas para la tarde de este lunes fueron suspendidas. Y quienes pudieron visitar a sus presos en la mañana confirmaron la militarización de las instalaciones del Penal. Ninguna autoridad las escuchó.

La presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Vilma Núñez, confirmó que tras la actuación policial varias de las mujeres fueron conducidas a la Delegación Policial de Tipitapa. Hasta este lunes se desconocía el número de arrestadas.

Núñez informó que ni las autoridades de la Penitenciaría ni de la delegación policial les han dado una versión oficial de los acontecimientos en “La Modelo” desde la semana pasada.

El asesor legal de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), Pablo Cuevas, también acudió al lugar después de varias denuncias recibidas.

Varias de las familiares de los privados de libertad alegaron que el sábado por la noche los golpearon. “A él me lo mandaron al hospital y me le fregaron una costilla, ahora él me está llamando que lo tienen sin comida, sin ropa, sin zapato, sin agua y sin luz”, denunció la cónyuge de uno de los reos.

¿Funcionarios venden recargas a internos?

“No peleamos por la señal de teléfonos, peleamos por los derechos de ellos”, expresó la mujer, que prefirió no ser identificada por temor a represalias.

Sin embargo, las mujeres indican que el trasfondo es otro: “En un kiosco del Penal venden recargas telefónicas a los reos, los funcionarios los obligan a comprar recargas y el que no lo haga, no tiene comunicación”, comentó una de las protestantes.

“Yo le dije a mi hijo, hijo yo no tengo 300 pesos para comprar esa tarjeta, aguantate, vamos a ver cómo hago para ayudarte a comprarla”, afirmó Angélica María Meza, quien expresa su preocupación porque no sabe cómo está uno de sus dos hijos presos, pero a ella le aseguran que lo golpearon en un ojo.

“Dicen que los meros funcionarios les dan esa tarjeta. Ellos se las venden y el que no tenga 300 córdobas no tiene comunicación con nadie. Eso es horrible, esa es corrupción porque cómo van a negociar adentro los mismos funcionarios. En vez de cuidar a los reos”, dijo la mujer.

Sistema Penitenciario supuestamente no acata órdenes

Una de las mujeres en el lugar dijo que desde el ocho de febrero su hijo recibió orden de libertad, pero las autoridades no han acatado la orientación. La mujer prefirió no decir su nombre ni el de su hijo por temor a represalias.

Camila Fernández, otra de las protestantes, asegura que las autoridades intentan aparentar que todo está normal en el interior de la prisión, pero les han suspendido las visitas. Esto, para Fernández, es un indicativo de que las autoridades penitenciarias tratan de evitar que los vean porque los han golpeado.



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