La noticia de la construcción de un hotel en las ruinas del Hospital San Juan de Dios generó mucha opinión entre los pobladores que en su mayoría han solicitado una consulta ciudadana por el valor sentimental, cultural y arquitectónico que posee este viejo edificio.
Los entendidos aseguran que “es la única pieza neoclásica completamente auténtica que existe en Granada”. Su fachada, la primera crujía donde funcionaba la capilla y algunas áreas importantes del hospital fueron inauguradas en 1905, tras ocho años de construcción, según explicó el historiador Fernando López Gutiérrez.
Dijo además que el terreno fue donado por la familia Urtecho.
Desde hace varios años se instalaron varias oficinas de la Alcaldía Municipal en la parte trasera del edificio, donde funcionó la morgue, neonatología y el área de personas con problemas pulmonares. Durante la administración del exalcalde Eulogio Mejía se anunció la rehabilitación para dar cabida a un mercado de artesanía a donde incluso se trasladaría a los vendedores del parque central.
La idea además contempló un centro de convenciones con espacios para varias disciplinas del arte, entre otros.
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López dijo que durante el gobierno de Arnoldo Alemán (1996-2001) se propuso destinar ese sitio como un centro cívico, donde se ubicarían todas las oficinas del gubernamentales.
Hace unos seis años también hubo propuestas de construir un hotel con un consorcio norteamericano, que según López tuvo rechazo por parte de la población y la comisión ciudadana.
Pedro Joaquín Alemán, quien habita en el barrio La Estación, dijo que en los años ochenta fue intervenido quirúrgicamente en ese hospital y su familia también tuvo la oportunidad de asistir a ese centro, por lo que el valor sentimental para él es alto.
Consideró que se debió cuidar la infraestructura y no dejar que se destruyera, para darle cabida a un nuevo hospital o bien a un centro de salud con mejores condiciones de las que hay ahora.
El concejal del PLI, Félix Vega, refirió que antes de aprobarse alguna construcción en el sitio, se deben analizar los beneficios que dejará al municipio y sobre todo transparentar en la inversión y quiénes son los inversionistas, tomando en cuenta el valor patrimonial del mismo.
Agregó que la construcción de un hotel sería beneficioso para los terrenos vecinos que tendrán mayor valor y además podría generar empleos, pero se debe tomar en cuenta al pueblo.
¿A quién le pertenece?
En este momento la población desconoce a quién pertenece el dominio del edificio. Antes se explicó que estaba en manos de la municipalidad, pero después apareció el Intur como garante o dueño del lugar, sin embargo no existe una información clara sobre ese tema.
“Si la Alcaldía tiene posesión o dominio debió plantearse antes de tomar una decisión, al Concejo Municipal y hay que abrir un debate público para saber si los granadinos queremos que ese espacio sea destinado a un hotel”, dijo el historiador Fernando López.