La vicepresidenta designada por el Consejo Supremo Electoral, Rosario Murillo, afirmó que el municipio de Nagarote, ubicado a unos 42 kilómetros de Managua en departamento de León, se encuentra bajo Alerta Epidemiológica debido que en las últimas semanas el Ministerio de Salud (Minsa) registró 11 casos de hepatitis.
“Hay una alerta (por) el incremento de casos de hepatitis en Nagarote. Los estamos atendiendo, (hasta el momento) llevamos (registro de) 11 casos de hepatitis viral, 8 se han presentado en las últimas dos semanas; estamos visitando las viviendas y en Alerta Epidemiológica en todo el Municipio”, dijo Murillo.
Aunque la funcionaria no brindó mayor información sobre este brote de hepatitis. A nivel nacional el número de personas que han adquirido este virus en las últimas semanas es mayor, según el reporte epidemiológico brindado por Murillo el pasado lunes 20 de marzo, en la semana del 13 al 19 de marzo el Minsa registró 18 casos de la enfermedad.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la hepatitis viral es una inflamación del hígado causada por uno de los cinco virus de la hepatitis. La hepatitis A y la E son causadas generalmente por la ingestión de agua o alimentos contaminados. Las hepatitis B, C y D se producen de ordinario por el contacto con humores corporales infectados.
Es por ello que recientemente el médico internista, Vicente Maltez, indicó que la escasez de agua es la causa del incremento de casos de diarreas y advirtió que podría desatarse brotes de hepatitis A, debido a que el agua aunque sea potable al ser almacenada por varios días pierde el efecto del cloro.
“Como no hay agua, hay carencia de agua en las tuberías, ya hay gente que tiene que caminar grandes distancias en busca del recurso (…). Esto trae consigo la obligación de guardar agua, entonces cuando usted tiene que guardar agua no siempre se guarda en recipientes confiables”, dijo Maltez.
Pocos síntomas
La infección aguda puede acompañarse de pocos síntomas o de ninguno; también puede producir manifestaciones como la ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos), orina oscura, fatiga intensa, náuseas, vómitos y dolor abdominal.
La OMS también refiere que casi todos los pacientes con hepatitis A se recuperan totalmente y adquieren inmunidad de por vida. No obstante, una proporción muy pequeña de casos pueden morir de hepatitis fulminante.
El suministro de agua salubre, la inocuidad de los alimentos, las mejoras del saneamiento, el lavado de las manos y la vacuna contra la hepatitis A son los medios más eficaces para luchar contra la enfermedad, según protocolos internacionales.