El ciudadano Pánfilo Romero fue condenado este viernes a 35 años de prisión por la violación y posterior asesinato de Juliana Angulo, de 82 años, cuyo cuerpo fue encontrado al fondo de un barranco en una comunidad de Santa Lucía, departamentos de Boaco. Los hechos ocurrieron el pasado 23 de diciembre.
La lectura de la sentencia se realizó en el despacho del juez de distrito penal de audiencia Aracellys Amador, quien dictaminó 20 años por el crimen de asesinato y 15 años más por el delito de violación agravada. Romero solo cumplirá 30 años de cárcel, puesto que esta es la pena máxima establecida en el Código Procesal Penal de Nicaragua.
La sentencia se leyó tres días después de que Romero aceptara los cargos. Mientras que Norlan Garzón, otro acusado, se rehusó a aceptar su culpabilidad y su juicio seguirá el 5 de abril de este año.
Durante el juicio, que tuvo cuatro reprogramaciones, Romero apartaba la cara para no ser grabado por las cámaras de los medios de comunicación. Durante la lectura de sentencia, el condenado no se inmutó al escuchar que saldría libre hasta el 26 de diciembre de 2046.
Familiares opinan
Luego de la lectura de sentencia, las hijas de la víctima expresaron su conformidad con el proceso contra Romero y esperan que pase lo mismo con el otro acusado.
Felipa Angulo, hija menor de la víctima, agradeció a la fiscal Heydi Duarte y a la Policía Nacional de Boaco por el acompañamiento que le brindaron a la familia. “No nos dejaron solos; esperamos la misma condena para Norlan Alberto Garzón, no queremos que lo saquen porque no queremos más sufrimiento en la familia”.
María Isabel Angulo, otra hija de la víctima, mencionó que la pena máxima aún no es castigo para los culpables del sufrimiento de su madre. “Nos sentimos un poquito conforme, peor es nada, se cumplió la pena máxima, aunque para la tortura que ella tuvo no era suficiente la pena máxima”.