La economía nicaragüense arrancó el año con robusto dinamismo, al crecer el Índice Mensual de la Actividad Económica (IMAE) en los primeros dos meses en promedio cinco por ciento, superior al 3.3 por ciento de similar lapso del año pasado, según publicó el Banco Central de Nicaragua. Solo en febrero este indicador creció 4.9 por ciento, mayor al 3.9 por ciento de igual mes del año pasado.
En término promedio anual el repunte es del 4.8 por ciento, superior al 4.3 por ciento del 2016 en similar lapso.
El crecimiento de la economía está siendo impulsado por actividades como la pecuaria, la silvicultura y extracción de madera, hoteles y restaurantes; administración pública y defensa, así como la intermediación financiera.
Por actividades económicas, la pecuaria registra una expansión promedio de año del 25.1 por ciento, lo que significa una mejora comparada con la caída del 10.5 por ciento que experimentaba el año pasado en este mismo lapso. Solo en febrero aumentó 16.7 por ciento como “resultado de crecimiento en todos sus componentes, en especial en la matanza vacuna, exportaciones de ganado en pie, huevos y matanza porcina”.
La silvicultura y extracción de madera acumula un crecimiento de 12.2 por ciento, “explicado en su mayoría por la extracción de madera y servicios de apoyo a la silvicultura”. Solo en febrero creció 13.8 por ciento.
El comercio crece 3.5 por ciento en el promedio de año, impulsado por el aumento en la demanda del comercio mayorista y minorista.
Los servicios de hoteles y restaurantes acumulan un crecimiento del 11.5 por ciento, debido a una mayor afluencia de visitantes procedentes del exterior.
La industria manufacturera creció 5.5 por ciento en los primeros dos meses, por aumentos en la elaboración de carnes y pescados, azúcar, productos lácteos, productos no metálicos, productos químicos, otros productos de origen industrial, entre otros, según el BCN.
El Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional pronosticaron esta semana para Nicaragua un crecimiento de 4.5 por ciento, estimación que estaría en línea con el porcentaje de entre 4.5 y 5 por ciento que prevé el Gobierno central.
Construcción no levanta cabeza
Pese al crecimiento de 3.1 por ciento de la actividad de construcción en febrero, el promedio de año se situó en -2.3 por ciento. “Entre los materiales de construcción que explican este comportamiento se encuentra la menor producción de cemento, bloques, adoquines, entre otros. Asimismo, se observó una disminución en las importaciones de acero”.
La actividad de agricultura cae 1.1 por ciento en el promedio de enero y febrero, pese a que en este último mes creció 1.3 por ciento, “debido a las mayores labores y producción de caña de azúcar, banano, soya, maní, ajonjolí, pastos, vegetales, raíces, tubérculos, frutas y los servicios relacionados con la agricultura, principalmente”.