Tres fotógrafos se presentaron en una corte francesa este martes por unas fotografías de la duquesa de Cambridge sin la parte superior de su traje de baño por las que están acusados de invasión a la privacidad tras escandalizar a la familia real británica.
Las imágenes fueron publicadas en una revista de farándula francesa en 2012, un año después de que Catalina, cuyo nombre de soltera era Kate Middleton, se casara con el príncipe Guillermo. La pareja presentó una denuncia en la corte, pero no asistió al juicio a las afueras de París.
Las fotografías de la duquesa fueron tomadas con lentes telefoto mientras ella y su esposo al parecer tomaban sol en un patio de una lujosa propiedad en la región de Provenza, en el sur de Francia. El propietario y el director ejecutivo de la revista de celebridades Closer también fueron demandados, junto con el editor de un diario regional francés que publicó igualmente las fotografías. Ninguno de los ejecutivos compareció en la corte.
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El abogado defensor François Blistene, quien representa a los fotógrafos Cyril Moreau y Dominique Jacovides, afirmó que sus clientes son inocentes y que está seguro de que serán exonerados. “La investigación fue fallida”, dijo Blistene. “Estaban buscando chivos expiatorios y encontraron a estos dos. Pero los elementos en el expediente muestran que ellos no estuvieron involucrados”. El abogado agregó: “Como diría Shakespeare: ‘Mucho ruido y pocas nueces'”.
Paul-Albert Iweins, el abogado del dueño de la revista Closer Ernesto Mauri, dijo que no entendía por qué la pareja real estaba tan molesta como para ir a la corte. “El artículo hizo a todos felices, desde los lectores a la familia real, sin importar lo que digan. La pareja fue mostrada bajo una luz muy favorable”, dijo Iweins.
Un fiscal pidió a la corte que imponga multas sustanciales a los ejecutivos y a los fotógrafos. Jean Veil, abogado de Catalina y Guillermo, dijo que buscaba una indemnización cuantiosa.
El veredicto del juicio se espera para el 4 de julio.