Lilian Tintori, esposa del opositor venezolano Leopoldo López, visitó este domingo a su marido en la cárcel donde cumple una condena de casi 14 años y aseguró que este se encuentra en buen estado de salud, luego de una serie de informaciones que indicaban que había sido trasladado a un hospital y luego de 35 días sin saber nada de él.
“Estoy bien, estoy vivo, estoy fuerte”, dijo el opositor a Tintori según ella misma afirmó ante periodistas al salir de la prisión militar de Ramo Verde, ubicada a las afueras de Caracas, luego de un mes en el que al también exalcalde caraqueño le fueron prohibidas las visitas de familiares y abogados.
Asimismo, confirmó que López grabó la “fe de vida” que difundió el Gobierno esta semana a través del canal del Estado pero aseguró que su mensaje fue editado para omitir las críticas del opositor por la situación de “aislamiento” en la que supuestamente se encuentra.
Luego de 35 días sin ver a Leopoldo, este es mi mensaje a Venezuela y al mundo https://t.co/xfzUDMWfn4
— Lilian Tintori (@liliantintori) 7 de mayo de 2017
Según Tintori, en el video que López grabó originalmente este explica la condición de aislamiento e incomunicación en la que se encuentra.
“Leopoldo resiste en la cárcel, nosotros resistimos en la calle”, declaró Tintori, añadiendo que le comentó todo lo que ha pasado en Venezuela en el último mes que no habían tenido comunicación.
En un vídeo difundido a través de la televisión estatal venezolana, López envió el miércoles un mensaje de “fe de vida”, en medio de una serie de informaciones que indicaban que el político había sido trasladado a un hospital.
El opositor, condenado a casi 14 años y encerrado desde hace más de tres, aparece en el vídeo vestido con una camiseta y diciendo la fecha y la hora local, mientras asegura que está bien y envía a continuación saludos a su familia, al tiempo que dice no entender “por qué se quiere dar una fe de vida en este momento”.
La organización de derechos humanos Human Rights Watch pidió esta semana permiso al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, para visitar al político con el fin de “disipar cualquier duda sobre la salud” del prisionero.