Sin bien demostró que es capaz de hacer ajustes sobre la marcha y hacer un uso eficiente de sus herramientas para limitar el daño, JC Ramírez no quedó totalmente conforme con su apertura del sábado frente a los Astros de Houston.
Seis entradas de una carrera representan una sólida apertura, pues de la oportunidad al equipo de mantenerse en el juego y hasta ganar, tal como sucedió en el triunfo de los Ángeles, de Los Ángeles, 2-1 frente a los Astros, quienes quedaron tendidos. Pero ahora Ramírez desea más que aportar en cada una de sus salidas.
“Hoy (sábado) estuve batallando. No tenía control en mi slider, por lo que ellos (Astros) estaban esperando a que yo lanzara sobre la zona de strike”, comentó Ramírez a Los Ángeles Times tras el partido.
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Y es que el nicaragüense tuvo que lidiar con problemas durante todo el partido, al permitir ocho imparables, dar dos bases por bolas y golpear a uno.
Pero la pérdida de su slider (en esta ocasión) la compensó con un uso efectivo de su recta y curva, picheos con los que obligó a roletear al infield constantemente a sus oponentes.
De hecho, en tres momento claves JC logró salir de apuros obligando a batear rodados a la segunda base que se convirtieron en doble play.
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Perdió el enfoque
Y el nica también fue víctima de la desconcentración, pues en un rodado de Josh Reddick a segunda, no asistió a cubrir la primera de inmediato y perdió la oportunidad de un doble matanza en el quinto inning, pero acto seguido, logró el doble out frente al peligroso Carlos Correa.
“Yo estaba un poco feliz. Tengo que llegar a la primera base para conseguir una doble jugada, eso estaba en mi cabeza a través de todo el turno (contra Carlos Correa)”, comentó sobre este momento, que fue quizás el más determinante para él en el juego.
Según el calendario de juego de los Ángeles, JC Ramírez deberá abrir el próximo jueves, ante los Tigres de Detroit en Los Ángeles.