El Real Madrid viaja este domingo (12:00 p.m.,) al campo del Málaga en la 38ª y última jornada de la Liga española en busca del último punto que necesita para conseguir un título que no conquista desde 2012 y al que también aspira, con muchas menos opciones, el Barcelona.
La victoria el miércoles contra el Celta en el partido pospuesto de la 21ª jornada del campeonato español colocó a los blancos líderes con tres puntos de ventaja sobre el Barcelona, por lo que un empate les bastaría en el estadio de La Rosaleda para alzar su 33 título liguero.
“Todavía nos falta un partido, todavía no está sentenciada la Liga”, aseguraba el miércoles Zidane, que pide concentración a su equipo hasta el último minuto, especialmente frente a un Málaga en dinámica ascendente desde que se puso al frente el exmadridista Miguel González “Míchel”.
El Málaga ha ganado cuatro de sus últimos cinco partidos y el 8 de abril pasado le encajó un 2-0 al Barça.
Zidane podrá recurrir a su once de gala, especialmente sabiendo que contará después con 15 días para preparar su otra gran cita, la final de la Liga de Campeones, con lo que podría conseguir un bonito doblete que no logra desde 1958.
El Barcelona, relegado ahora a tres puntos de los blancos, recibirá el domingo a un siempre complicado Eibar en busca de una victoria que sólo le valdría en caso de gran pinchazo del Real Madrid.
Messi “pichichi” virtual
Si los blancos pierden y el Barça gana, empatando de nuevo a puntos, los azulgrana serían campeones de Liga gracias a su mejor diferencia de goles particular (1-1, 3-2).
“A lo largo de la historia, hemos visto situaciones que se dan, en la historia reciente, de resultados en las últimas jornadas, y todo puede pasar”, advertía el domingo pasado el técnico azulgrana, Luis Enrique Martínez.
Y los blancos todavía tienen en la memoria las dos Ligas perdidas en la última jornada en 1991-1992 y 1992-1993, cuando su derrota ante el Tenerife que entrenaba el también exmadridista Jorge Valdano dio la Liga al Barcelona.